Redacción / IP Nicaragua
Unos 16 mil pequeños y medianos productores que, en promedio poseen entre dos y 18 manzanas de tierras cultivables en Madriz, se preparan para la siembra de primera.
Motivados por las lluvias que han estado cayendo en los últimos cinco días en algunas zonas de varios municipios de Madriz, las familias del campo ya comenzaron a limpiar sus terrenos, que incluye cortar y quemar malezas.
Posteriormente meten arado y tiran la semilla para la siembra de primera de maíz, frijol y sorgo que tradicionalmente inicia a mediados del mes de mayo.
El campesinado ha pronosticado que este año habrá un buen invierno en la región norte de Las Segovias, lo que facilitará una buena cosecha, por lo que ya están alistando sus parcelas de tierras para la siembra de las semillas.
“Estamos comenzando al roce (limpieza con machete) de las tierras para aplicar herbicidas y después arar y aplicar abono y urea y esperar que comiencen a caer los aguaceros para tirar las semillas de maíz y frijol”, dijo Santiago Gutiérrez López, originario de la comarca El Jobo de la comunidad de Santo Domingo en el municipio indígena de Totogalpa.
Insumos agrícolas con elevado costo
Gutiérrez López lamenta que este año estará muy caro sembrar, porque todos los insumos del campo han subido de precio.
“Este será como el año anterior, va a ser muy caro sembrar maíz y frijol, porque con los altos costos en el precio de los insumos va a andar por más de 3, 500 córdobas cultivar una manzana de tierra», mencionó el productor.
Recordó que hace tres años se gastaba entre mil y mil 500 la manzana aplicando pesticidas, herbicidas, abono a la tierra y otros fertilizantes, «más la renta de una yunta de bueyes y la paga de mozos, además de la compra de semillas”.
Luis Alberto Gómez, campesino de la comunidad de Cacaulí, en el municipio de Somoto, cabecera del departamento de Madriz, dijo que con las primeras lluvias van a preparar las tierras para la siembra de maíz y frijol.
«Ya estamos alistando unas cuatro manzanas de tierras con la esperanza de sembrar y sacar una buena cosecha, porque el año pasado se perdió parte de lo cultivado ante la falta de lluvias. Este año se avizora un buen invierno”, explicó Gómez.
Por su parte, Santos Bonifacio Díaz Salgado, campesino de una de las comunidades del municipio indígena de San Lucas dijo que este año necesitarán invertir unos 3 mil córdobas más para poder sembrar maíz, frijol y sorgo.
“Antes cultivamos una manzana de tierra con unos mil 200 a mil 500 córdobas, pero como todo ha subido vamos a gastar más”, señaló.
Mencionó que medio litro de cipermetrina para atacar las plagas o pestes en los cultivos anda por 190 córdobas, “antes se compraba en cien”, detalló.
“Vamos a tener que volver a los venenos caseros que se hacían de hojas de Madrial con Nin y otros ingredientes, porque hasta la urea vale más de mil 200 y el abono mil 600 córdobas”, detalló Santos Bonifacio.
Grandes dificultades para sembrar
A la preocupación por los altos costos en los precios de fertilizantes y otros insumos agrícolas, se le añade a las familias del campo la falta de crédito de bancos, de las microfinancieras y la nula asistencia técnica y apoyo del gobierno central.
“Aquí muchos pozos cavados a mano hace diez años atrás, se secaron totalmente y ésto nunca había pasado, también nos asustamos porque casi todos los ríos se quedaron sin agua producto del despale, los focos de incendios en casi toda la zona y la sequía que golpeó mucho a la gente de las comunidades más pobres”, comentó Estebana Martínez Lazo, del municipio de Palacagüina, en Madriz.