El nombre de Vanusia Nogueira, sonó con mayor fuerza al convertirse en la primera mujer en asumir el comando de la Organización Internacional del Café (OIC) que reúne al 98 % de los países productores del grano y al 67 % de los consumidores.
La nominación de Vanusia para el principal cargo de la industria mundial del café es el resultado del trabajo desarrollado principalmente como directora de la Asociación de Cafés Especiales de Brasil (BSCA).
También ha destacado en importantes foros internacionales, como la Asociación de Cafés Especiales (SCA), el Foro Mundial de Productores de Café (WCPF), Rainforest Alliance, Alliance for Coffee Excellence (ACE), entre otros.
“Ha sido un honor ver que mi trabajo ha sido reconocido y que mi candidatura ha sido respaldada, no sólo por el sector privado, sino también por organismos gubernamentales brasileños”, destacó la ejecutiva.
La brasileña dijo que era consciente del gran reto que asume, que es liderar la reestructuración y modernización del ICO.
La nueva presidenta de la OIC tiene un doctorado en Administración, además de numerosos cursos internacionales de especialización en caficultura realizados en Estados Unidos, Brasil y Alemania, lo que la posicionó como la candidata con mayor proyección de liderazgo en la organización.
Cabe destacar que la OIC se creó en Londres en 1963, por recomendación de las Naciones Unidas, debido a la gran importancia económica del producto.
Dicha organización, administra el Convenio Internacional del Café, que se actualizó por última vez el 2 de febrero de 2011.
El OIC es el principal organismo intergubernamental del sector y reúne a los gobiernos exportadores e importadores para abordar los retos a los que se enfrenta la industria mundial del café mediante la cooperación internacional.
La especialista, asumirá la presidencia de la OIC en mayo de 2022, dice sentirse incómoda por la ausencia en la organización de importantes países consumidores, entre los que mencionó la mayoría de Asia, los de Oriente Medio, «que hoy son importantes consumidores», y los de Oceanía.
«Quiero desde un comienzo hacer esfuerzos para sentarme con ellos y entender por qué no están, lo que falta para que puedan estar, y poder construir una agenda conjunta que pueda atraerlos», afirmó la lideresa.
Durante 15 años como directora de BSCA, Vanusia ha promovido los cafés brasileños en el país y en el extranjero, destacando la calidad y sustentabilidad de su producción.
La brasileña ha contribuido en la consolidación del producto nacional con socios tradicionales y a la apertura de nuevos mercados para los granos brasileños, que deleitan a nuevos compradores con diversidad y excelencia.
También dirigió los trabajos para la implementación, en 2008, del Proyecto Sectorial “Brasil. La nación del café”, desarrollado en colaboración con la Agencia Brasileña de Promoción del Comercio y la Inversión (Apex-Brasil), centrado en la promoción comercial del café brasileño en el mercado exterior.
Hace 25 años como directora de BSCA, Vanusia promovió los cafés de Brasil en el país y en el extranjero, destacando la calidad y sostenibilidad de la producción, contribuyendo a la consolidación del producto nacional en los socios tradicionales y a la apertura g de nuevos mercados para los granos brasileños, que deleitan a los nuevos compradores con la diversidad y excelencia.
La brasileña se ve muy preocupada por la baja en el precio del grano de oro en el mercado internacional.
Agregó que ese problema tiende a agravarse por la actual crisis en Ucrania ya que esa región es importante productora de fertilizantes.
“Por el lado de los países compradores, además de pagar precios más elevados, hay aumento de costos y escasez por una crisis muy compleja de fletes, contenedores y navíos”, agregó a agencias de noticias internacionales.
“Estamos teniendo una presión de precios por todos los lados y no creo que eso pueda cambiar en lo que resta del año. Creo que vamos a tener una acomodación mayor en el 2023″, detalló.
Cabe destacar que la cotización internacional del grano llegó a caer en el 2019 a menos de un dólar por libra (US$ 0.95), su menor valor en 12 años y un precio en un 45% inferior al que tenía en el 2011, pero en febrero de este año ha saltado a US$ 2.58 por libra, su mayor valor desde setiembre del 2011.
La caída en el 2019 fue provocada por el exceso de oferta, ya que Brasil recogió en el 2018 una cosecha entonces récord (61.7 millones de sacas de 60 kilos) y equivalente al 37% de la producción mundial.
