Nicaragua corre riesgo de aumentar casos de demencia en las próximas tres décadas

Redacción / IP Nicaragua

Tres cosas harían posible un mal pronóstico para la salud mental en Nicaragua: la automedicación, 22 meses viviendo bajo la pandemia de Covid-19 y las consecuencias de la crisis política y social que está por cumplir cuatro años.

A esa conclusión llegaron especialistas al reflexionar sobre un estudio de la prestigiosa revista The Lancet Public Health que advierte que en el país centroamericano habrá más personas con demencia que en el resto de países de América Latina en el año 2050.

La psiquiatra Gioconda Cajina considera que las condiciones están dadas en Nicaragua, debido a la situación que se vive en el país.

“No es descabellado, sobran razones para esperar que eso puede suceder si no se toman precauciones”, agregó Cajina.

¿Qué dice el estudio?

La investigación, que analiza datos de 195 países, busca dar a los gobiernos una idea de qué  medidas podrían ser necesarias.

Las proyecciones para los próximos 30 años, más que preocupar, alarman.

El estudio señala que para el año 2050, Nicaragua pasará de 28, 500 pacientes a casi 117,000, es decir los casos se multiplicarán.

“La gente se está automedicando en exceso, vemos que en Nicaragua hay más farmacias que pulperías”, señaló Cajina.

La psiquiatra añadió que ese es uno de los problemas que más afectan la salud de los  nicaragüenses.

“Hay medicamentos con efectos secundarios y si hay abusos, hay graves riesgos (…) Pastillas como la omeprazol y la ranitidina, que son medicamentos que en una farmacia se adquieren con facilidad, contienen componentes que tomados en exceso pueden afectar la memoria», afirmó Cajina.

La psiquiatra además recordó que los antigripales y los antidepresivos, especialmente los que se usan para dormir, «mantienen el sistema nervioso bloqueado», lo que puede dañar las neuronas
irreversiblemente.

¿Qué pasará el mundo?

El mundo llegará a tener unos 153 millones de personas padeciendo demencia, concluye la investigación.

Según el estudio, las proyecciones se sustentan en gran medida al envejecimiento y al incremento de la población.

Un estilo de vida poco saludable también contribuye al problema, al igual que los problemas de obesidad y diabetes.

La pandemia y la crisis sociopolítica

Roberto Ordóñez es psicólogo y dijo que desde que inició la pandemia de Covid-19 atiende a pacientes con mucho estrés y depresión.

“Ambos son trastornos, síntomas de afectaciones en salud mental también”, advirtió el psicólogo.

Según el Mapa Nacional de la Salud del Ministerio de Salud (Minsa), en 2019 un total de 9,964 personas padecían problemas relacionados a la salud mental.

Al cerrar el 2020, que fue el año en que el Covid-19 comenzó a atacar a los nicaragüenses, los pacientes con problemas mentales llegaron a 14,594.

“Y eso que no se toman en cuenta aquí los subregistros, porque hay gente que va a consultorios privados o no informan para ser registrados de forma oficial”, afirmó Ordóñez.

La pandemia trajo «aislamiento, muertes y la lucha contra una enfermedad desconocida», todo eso ha causado trauma en las familias y han dejado serias secuelas, alertó Ordóñez.

A criterio de Ordóñez, los nicaragüenses ya venían padeciendo daños a la salud mental como secuelas de la crisis política y social.

“Aquí hay violencia política, femicidios, desempleo y una vida que está cada vez más cara. Todo eso afecta”, mencionó el experto.

Cajina advirtió que los nicaragüenses padecen también “mucha ansiedad y mucha incertidumbre” por lo que pasa en el país».

*Fotos referenciales

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