Covid-19 golpea con fuerza a mujeres que viven en medio de la pobreza en Condega

Redacción / IP Nicaragua 

Aunque tienen la esperanza de un mejor porvenir, actualmente la incertidumbre y la violencia son aspectos que agravan las condiciones de las mujeres en el área rural de Condega, uno de los municipios del departamento de Estelí que está siendo fuertemente golpeado por la pandemia de Covid-19.

Representantes de algunas organizaciones de mujeres, sostienen que los contagios en dicho municipio son frecuentes y a diario hay fallecidos, incluyendo jóvenes que se rinden a los estragos que provoca la Covid-19.

“Ayer enterramos a mi suegro y también murió un muchacho de tan solo 23 años”, expresó una pobladora que pidió omitiéramos su nombre.

Al primero de septiembre de 2021 el Observatorio Ciudadano Covid-19 reporta un acumulado de 23,225 casos sospechosos desde todos los departamentos y regiones autónomas. De acuerdo con sus informes en el departamento de Estelí acumula 1,500 de esos casos.

«Continuamos recibiendo reportes de casos y muertes sospechosas en personas ya vacunadas, incluso con esquema completo (2 dosis de vacunas); mientras continúan en el país los esfuerzos de vacunación, recordamos a la población que la vacuna protege contra las formas severas de la enfermedad y disminuye el riesgo de muerte; a pesar de haber
recibido la vacuna debemos seguir aplicando todas las medidas de prevención», señala el Observatorio Ciudadano.

En el campo es difícil la situación

Luisa Centeno, de la Red de Mujeres contra la Violencia, informó que la situación en el campo es mucho más difícil en estos momentos cuando la vida social y comunitaria se está perdiendo, tanto por la pandemia como por el contexto político que impide transitar con libertad.

Hay confusión, incluso en el campo, donde por un lado hay un discurso de supuesta tranquilidad y control del virus, pero las afectaciones en la comunidad y otros lugares del municipio son evidentes y reflejan una triste realidad.

Como si fuera poco, bajo ese contexto, «las mujeres que sufren violencia doméstica tienen más dificultades para exponer sus casos, porque no tienen recursos económicos suficientes para buscar apoyo en las autoridades y cuando logran llegar a la policía, generalmente lo que encuentran como respuesta es la propuesta de un abogado para una mediación», expresó Centeno.

La escasez de alimentos podría presentarse en zonas rurales del municipio porque no hubo producción de primera, debido a que el invierno, durante el ciclo agrícola, no estuvo bueno.

Esta situación ha empeorado las condiciones en medio de esta pandemia lo que ha obligado a familias enteras a emigrar a los Estados Unidos “algo alarmante es que las personas están perdiendo la esperanza. Desde el cinco de junio al mes de agosto al menos cinco muchachos se han suicidado, lo que refleja parte del drama que los nicaragüenses vivimos, advirtió Centeno.

* Colaboración de Voces en Libertad

 

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