Ordenan sacar al canal católico de Nicaragua de la programación de cable nacional

El Canal Católico de Nicaragua (CCN) es propiedad de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) y transmite todas las eucaristías de los obispos, así como las actividades de los feligreses.

A través de un comunicado de la empresa Claro, se informó la eliminación del Canal Católico de Nicaragua (CCN) de las grillas de programación de televisión de cable nacional.

La empresa Claro Nicaragua informó por medio de un comunicado publicado en sus redes sociales que por orientaciones de Instituto Nicaragüense de Telecomunicaciones y Correos (Telcor), el canal se limina de la grilla de programación del servicio.

Cabe destacar que el canal católico es propiedad de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) y transmite todas las eucaristías de los obispos de Nicaragua, así como las actividades de los feligreses.

“En atención a las disposiciones emitidas en el Código de Prácticas Comerciales de ENITEL (Empresa Nicaragüense de Telecomunicaciones), Capítulo II, Acápite X, incisos a y d, que disponen la obligación del operario de informar cambios en canales ofrecidos, informamos a nuestros usuarios de televisión por suscripción que por indicaciones de TELCOR, Ente Regulador, el canal 51, Canal Católico, está siendo eliminado de la grilla de canales”, informó Claro mediante un breve comunicado.

El comunicado se dio en el contexto de una denuncia publicada por monseñor Rolando Álvarez Lagos, obispo de la Diócesis de Matagalpa y Administrador Apostólico de la Diócesis de Estelí, quien describe que hay una persecución policial en su contra.

Ante esto el religioso inicio una jornada de ayuno y oración para pedir el cese de la persecución en contra de la Iglesia Católica que se ha generado en los últimos días.

«Lo que pienso es que no solo de mí, sino que en general de los pastores de la iglesia», lo que el Gobierno quiere «es una iglesia muda, que no anuncie la esperanza del pueblo (…) y la denuncia del pecado personal y de las estructuras de injusticia», anotó el obispo Álvarez en una conferencia de prensa improvisada desde la parroquia Santo Cristo de Esquipulas, ubicada en las afueras de Managua.

«Si la Iglesia callara, las piedras gritarían», agregó el jerarca ante un reducido grupo de medios de comunicación, entre ellos la Agencia Efe, que logró ingresar a la parroquia antes de que fuera sitiada por decenas de agentes policiales.

Álvarez explicó que, si bien es vigilado desde que empezó a denunciar supuestos abusos del Gobierno, tras el estallido social de abril de 2018 que dejó cientos de muertos, fue hasta ayer jueves que sufrió «una real, verdadera y auténtica persecución» policial.

Aseguró que «dos patrullas de la Policía, totalmente llenas de policías, (más) cuatro policías en dos motocicletas», lo persiguieron «durante todo el día» en todos sus movimientos, por lo que, por su seguridad y la de su familia, optó por viajar de la ciudad de Matagalpa hacia Managua y comenzar el ayuno indefinido, oración y exorcismo.

Facebook
Twitter
LinkedIn
Email