“El gobierno está actuando criminalmente en el tema de la pandemia”

* El padre César Augusto Gutiérrez Nicaragua, quien era el responsable de la parroquia San Sebastián, en el barrio Monimbó, Masaya, y que se encuentra exiliado en Guatemala desde el 2018, considera “un atentado contra el pueblo” el haberle negado a monseñor Rolando Álvarez, el permiso para el proyecto de prevención médica frente a la pandemia por Covid-19.

 

GUSTAVO ÁLVAREZ 

 

El sacerdote nicaragüense César Augusto Gutiérrez Nicaragua, quien al estallar la crisis de abril de 2018 estaba a cargo de la parroquia San Sebastián, en el barrio Mominbó, Masaya, lleva ya un año y ocho meses de exilio en Guatemala, desde donde afirmó que siente preocupación porque el gobierno está evitando que la población se cuide de ser contagiada con el Covid-19.

En entrevista con IP Nicaragua, el cura manifestó que tiene conocimiento que elementos del gobierno siguen yendo a las Eucaristías para escuchar las homilías y mantienen vigilancia sobre algunos de los obispos y sacerdotes más críticos.

El religioso desea regresar a Nicaragua lo más pronto posible. Foto: Cortesía / IP Nicaragua.

Gutiérrez Nicaragua, quien tuvo que salir por puntos ciegos hacia Honduras el 15 de agosto de 2018 tras recibir amenazas de muerte y de ser encarcelado, afirma que sabe que el pueblo de Monimbó sigue sufriendo el asedio, la persecución de parte de la Policía, pero que se mantienen resistiendo con valentía, aunque muchos han tenido que huir y exiliarse.

Aseguró que regresar a Nicaragua es algo que desea profundamente, pero que eso será hasta que cambie este gobierno.

¿CÓMO HA SOBRELLEVADO ESTE TIEMPO DE EXILIO?

Los primeros meses fueron difíciles emocionalmente hablando. Dejar Nicaragua, salir por un punto ciego en las montañas del Norte y entrar a Honduras y recorrer también la montaña hasta salir a la carretera que me llevó a Tegucigalpa. El dolor de tener que dejar atrás a tantos amigos de Masaya y Monimbó con quienes compartí la fe como sacerdote y el amor a Nicaragua.  Gracias a Dios la comunidad salesiana me ha sostenido y animado y me integré al trabajo pastoral en la parroquia Divina Providencia.

¿CÓMO VE LA SITUACIÓN DE NICARAGUA?

El régimen está por caer, es cuestión de tiempo. Ellos están sostenidos únicamente por ese grupo de matones armados que son la Policía orteguista.  Me duele la ausencia de Gobierno, el abandono en que se encuentra el pueblo. A esto se suma la terrible pandemia del Covid-19, la desinformación y negación de la realidad y la falta de un plan que tenga por objetivo salvar el mayor número posible de enfermos. Al contrario, parece que lo que quieren es provocar el contagio y la muerte.

Gutiérrez considera que el gobierno de Ortega está actuando de forma «criminal» ante la pandemia. Foto: Cortesía / IP Nicaragua.

¿HA PENSADO EN REGRESAR A NICARAGUA?

Regresar a Nicaragua es algo que deseo profundamente, apenas caiga la dictadura para celebrar junto al pueblo la libertad y animar la esperanza.

¿QUÉ HA SABIDO DE LA SITUACIÓN EN MONIMBÓ?

Gracias a Dios mantengo comunicación constante con varios amigos allá en Masaya y miembros de los grupos de la Iglesia. Sé que siguen sufriendo el asedio, persecución de parte de la Policía, pero se mantienen resistiendo con valentía. Muchos han tenido que huir y exiliarse.

¿CREE QUE LOS ATAQUES A LA IGLESIA HAN DISMINUIDO O CONTINÚAN IGUAL?

No han dejado de intimidar, aunque ha bajado un poco. Sé que, por ejemplo, siguen yendo a las Eucaristías para escuchar las homilías y mantienen vigilancia sobre algunos de los obispos y sacerdotes más críticos.

Foto: cortesía / IP Nicaragua.

¿CUÁL ES SU OPINIÓN SOBRE LA PROHIBICIÓN QUE RECIBIÓ EL OBISPO DE MATAGALPA, ROLANDO ÁLVAREZ, PARA INICIAR UN PROYECTO QUE PRETENDÍA APOYAR A LA POBLACIÓN CON EL TEMA DE LA PANDEMIA DEL CORONAVIRUS?

Parte esencial de la misión de la Iglesia es la promoción humana. Servir a la vida de la gente es la esencia del Evangelio. Por eso considero un atentado contra el pueblo y contra la salud la negación de la autorización para atender la emergencia de la pandemia (con el proyecto que pretendía instalar monseñor Rolando Álvarez).

¿CÓMO HA VISTO EL MANEJO DE LA PANDEMIA DE PARTE DEL GOBIERNO DE NICARAGUA?

Sobre el manejo de la pandemia por parte del Gobierno, creo que están actuando criminalmente. La prohibición de que se informe sobre la realidad de cuántos enfermos hay, la negación de que los médicos usen equipos de protección, el ocultar información, etcétera, todo lo que están haciendo es atentar contra la vida del pueblo.

EL MUNDO ESCUCHÓ SU DRAMÁTICO LLAMADO DE AUXILIO CUANDO SE DIO LA LLAMADA «OPERACIÓN LIMPIEZA» EN MASAYA. ¿PENSÓ QUE IBA A MORIR?

La “operación limpieza” en Masaya fue un momento muy duro. Estaba resguardado, pero seguía en comunicación con algunos en Monimbó y escuchaba las ráfagas de las balas, y luego los muertos y los presos, los que huyeron a la laguna y los que salieron hacia Costa Rica. Desde entonces ya no pude ver más a los muchachos, encontrar a los fieles en la Iglesia. Fue duro.

USTED RECIBIÓ AMENAZAS DE MUERTE. ¿CUÁNDO TOMA LA DECISIÓN DE EXILIARSE?

Al principio fueron publicaciones en Facebook a las que no les di importancia,  pero después llegaron dos jóvenes que se hicieron pasar por periodistas a hacerme una “entrevista” y lo que querían era entrar al Colegio Salesiano de Masaya, ver la sacristía y otros lugares porque pensaban que escondíamos armas. Entraron, los atendí, no hallaron nada porque no teníamos más que víveres para repartir a algunas familias. Luego una persona me informó de un plan, una emboscada que preparaban para asesinarme. Y por último, un trabajador del Ministerio de Gobernación informó a los salesianos que estaban preparando una acusación en mi contra por financiar el terrorismo y, por eso, me iban a encarcelar. Fue en agosto de 2018. Ahí en una reunión de la comunidad y con el apoyo de monseñor Abelardo Mata (obispo de Estelí), se decidió que saliera del país, para salvar mi vida.