Redacción / IP Nicaragua
Tamara Dávila, la líder opositora declarada culpable en un juicio que duró siete días, denunció que lleva más de ocho meses en completo aislamiento.
«Quiero que todas las personas sepan que tengo más de ocho meses de estar en una celda sellada, en completo aislamiento, en donde me pasan la comida y medicinas por una pequeña escotilla», denunció Dávila.
En un mensaje enviado a través de su familia la opositora sostuvo que su único delito ha sido ejercer su derecho a «defender derechos y denunciar las injusticias».
El día que inició el juicio en su contra, el pasado 15 de febrero, fue la primera vez en más de ocho meses que logró comer con alguien.
Dávila junto otros seis líderes de la oposición fue encontrada culpable por el delito de menoscabo a la integridad nacional.
El Ministerio Público pidió una pena en su contra de ocho años de prisión.
«He sido perseguida y detenida ilegalmente, tenía más de seis meses de estar siendo vigilada permanentemente por la policía», dijo Dávila.
Demanda encuentro con su hija
El 12 de junio de 2021, Dávila fue arbitrariamente detenida en su domicilio, donde estaba su hija de cinco años.
Mi nieta tiene 227 días sin ver, oír o tocar a su mamá. El 12% del total de días de su vida. En #Nicaragua se están violando los derechos de una niña de 5 años y de otros niños y niñas, consignados en el #CodigoDeLaNiñez y que es obligación del Estado TUTELAR. #LibertadYa pic.twitter.com/744VnRSnlp
— Josefina Vijil (@VijilJosefina) January 25, 2022
«Yo estoy presa ilegalmente, han violentado todos mis derechos, exijo que no se los sigan violentando a mi hija de cinco años», dijo Dávila.
La presa política insistió: «No la castiguen, ella tiene derecho de ver a su madre y tener la certeza de que estoy viva».
Dávila exigió que la devuelvan a su familia el diario donde ha documentado la vida de su hija «desde que estaba embarazada».
«Ahí está escrita la memoria y la vida de una niña, no pueden violar su privacidad de esta forma
