Este miércoles 2 de marzo, día de la imposición de cenizas en el calendario católico e inicio de la cuaresma, Nicaragua contabiliza en los últimos 7 días 101 nuevos casos y una muerte por la enfermedad, según datos del Ministerio de Salud (Minsa).
Con este dato, el registro se elevó a 18,125 los contagios confirmados y a 226 los decesos acumulados, según el informe de las autoridades de salud.
De acuerdo con el Ministerio de Salud, desde octubre de 2020 la pandemia ha quitado la vida a una persona cada semana, de manera constante.
«En la presente semana hubo un fallecido atribuible a covid-19 y se presentaron otros fallecimientos en personas que han estado en seguimiento, debido a tromboembolismo pulmonar, diabetes mellitus, infarto agudo de miocardio, crisis hipertensivas y neumonías bacterianas», según el informe oficial, sin precisar la cantidad de muertos.
El Ministerio de Salud no explicó la relación entre los muertos por el coronavirus y los fallecidos con enfermedades crónicas en Nicaragua, un país de 6,6 millones de habitantes.
Los datos oficiales contrastan con los del Observatorio Ciudadano Covid-19, una red de médicos independientes que da seguimiento a la pandemia y que reporta 5.984 fallecimientos por neumonía y otros síntomas relacionados con el nuevo coronavirus, así como 32.032 casos sospechosos de contagio.
En ese contexto, la iglesia católica orientó a los párrocos del país no poner en riesgo la salud de los fieles durante las celebraciones de la Cuaresma, tomando en cuenta el incremento de casos de Covid-19, por lo que demandó «limitar o cancelar» las actividades de participación masiva.
El Arzobispo de Managua, cardenal Leopoldo Brenes, orientó que en aquellos lugares donde por costumbre y debido a la devoción por alguna imagen se realice una actividad masiva y con recorridos extensos, deberán hacer las consultas del caso.
«Los párrocos o administradores parroquiales consultando a especialistas en salud, junto a su consejo pastoral, deberán valorar con los vicarios foráneos la conveniencia de limitar o cancelar la realización de procesiones o cualquier otra actividad pastoral», dice una nota enviada por el cardenal.
También, el obispo de Granada Jorge Solórzano informó que las celebraciones de cuaresma, Semana Santa y Triduo Pascual se celebrarán con el cuidado suficiente para evitar contagios de la Covid-19.
«Les animo a celebrar, preparar y vivir la cuaresma y el Triduo Pascual, organizándolas, realizándolas con el cuidado suficiente para que sean celebraciones dignas y se eviten los contagios, para el sacerdote y los fieles celebrantes», señaló el obispo.
Monseñor Solórzano explicó que la cuaresma inicia este 2 de marzo con los ejercicios del miércoles de ceniza.
El jerarca de la Iglesia Católica pidió a sus feligreses vivir el periodo de penitencia reflexionando sobre la pasión de Cristo «desde la verdad».
«Todo el proceso de conversión debe alcanzar la psique, el espíritu y el cuerpo», señaló.
Procesiones, vía crucis, peregrinaciones, rosarios, hora santa e imposición de la ceniza deben realizarse con reflexión y meditación, destacó el obispo.
Monseñor Solórzano dijo que este año dichos ejercicios espirituales «pueden celebrarse en las calles de su parroquia, les pido que se cuiden usando todo el tiempo mascarillas y alcohol».
Hasta ahora las autoridades nacionales no han establecido restricciones para evitar la propagación de la pandemia en Nicaragua, y son criticadas por la escasa información que brindan sobre la misma.