El ejecutivo de la Unión Europea planea recaudar más de 140.000 millones de dólares para proteger a los consumidores ante la subida de los precios de la energía, recortando los ingresos de las generadoras eléctricas de bajo coste y haciendo que las empresas de combustibles fósiles compartan los beneficios inesperados.
La Comisión Europea publicó las propuestas el miércoles, mientras la Unión Europea, integrada por 27 miembros, se enfrenta a una crisis energética alimentada por la invasión rusa de Ucrania.
Los gobiernos de toda Europa ya han invertido miles de millones de euros en recortes fiscales, ayudas y subvenciones para hacer frente a una crisis que está disparando la inflación, obligando a las industrias a cerrar la producción y aumentando las facturas de cara al invierno.
«En estos tiempos, los beneficios deben repartirse y canalizarse hacia quienes más lo necesitan», declaró la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen, ante el Parlamento Europeo en Estrasburgo. Añadió que los planes deberían recaudar más de 140.000 millones de euros para que los Estados miembros los reorienten hacia la ayuda a las empresas y los consumidores minoristas.
Los países de la UE tendrán que negociar las propuestas de la Comisión y acordar las leyes definitivas.
El plan no incluye una idea anterior de limitar los precios del gas ruso. Los países de la UE están divididos en cuanto a si una limitación más amplia de los precios del gas ayudaría o dañaría los esfuerzos por asegurar los suministros en invierno.
Nuevos acuerdos
Con la eliminación de las limitaciones de los precios del gas, al menos por ahora, algunos diplomáticos se mostraron optimistas sobre la posibilidad de llegar a un acuerdo en la reunión de ministros de energía de la UE del 30 de septiembre.
Von der Leyen dijo que la Comisión estaba «discutiendo» los topes de precios y que había iniciado conversaciones con Noruega sobre reducir los precios del gas.
Las propuestas de la Comisión eliminarían el exceso de ingresos de las centrales eólicas, solares, nucleares y de carbon de lignito, imponiendo un tope de 180 dólares por MWh hasta marzo a los ingresos que reciben por generar electricidad.
Esto provocaria que los ingresos de los generadores quedaran limitados a menos de la mitad de los precios actuales del mercado. Los precios de la electricidad en la UE suelen estar fijados por el gas, por lo que la medida se aplicaría a los generadores que venden su energía a esos precios tan elevados pero que no necesitan comprar el combustible caro.
NOTA DE VOA.