Redacción / IP Nicaragua
Desde muy joven José Delgadillo descubrió su amor por los animales y se graduó de veterinario. En la actualidad se dedica a cuidar serpientes, algo que para muchos es una pesadilla, pero para él es una verdadera pasión. Tiene más de 40 de estos reptiles en su casa, desde las más pequeñas hasta las más grandes y desde las más inofensivas hasta las más peligrosas.
Delgadillo se ha hecho popular en las redes sociales por ser uno de los pioneros en tener este tipo de animales exóticos.
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Entre su colección tiene una falsa coral, una boa, un cascabel y pitones mismas que tienen un valor que nadie imaginaria, llegando a tener una inversión de más de 40 mil dólares en animales escamosos.
Su proyecto “reptiliano”
El matagalpino estudió la carrera de medicina veterinaria, pero asegura que “no le fue muy bien”, no encontró un empleo en su profesión, es por eso que decidió poner su propia veterinaria en conjunto con un amigo, pero esta idea tampoco les favoreció y tuvieron que cerrarla.
“Cuando yo inicié teniendo reptiles fueron dos boas machos y apareció un amigo que me dijo véndeme una, yo empecé a negociar las que yo tenía y se me ocurrió poner una tienda virtual que se llama Tienda de Mascotas Escamosas y los que me compraban serpientes, también adquirían el alimento, entonces, mi fuente de ingreso se basa en la venta de alimentos vivo como rata, ratones, cucarachas”, indicó el creador de este peculiar negocio.
Las serpientes las ha rescatado de casas a donde llegan buscando refugio, otras las ha comprado, señaló Delgadillo.
En la tienda los precios para tener un ejemplar varía entre los 400 y mil dólares dependiendo de la serpiente. Las iguanas, por su parte, tienen un valor de 2 mil córdobas en adelante.
Su sueño a futuro es crear un zoológico de reptiles en algún lugar de la ciudad, pero necesita un poco más de espacio y más presupuesto para echar a andar sus planes. De esta forma también ayudaría a la preservación de estas especies.
Nos comenta que su mamá, aunque asustada por la vocación, decidió dejarle la casa como muestra de apoyo a su trabajo, aunque ella no sea tan amante a los cascabeles y boas de más de cuatro metros de largo y 100 libras de peso.
“En mi casa recibo visitas y cobró un dólar la entrada y si quieren tomarse fotos con alguna serpiente cobró un dólar adicional, además, que yo oriento de manera personalizada a cada visitante para que conozcan más del reptil”, indicó Delgadillo.
Una inversión de 40 mil dólares en serpientes
Delgadillo estima que más de 40 mil dólares ha destinado a su valiosa colección, pero su pasión da para más ya que el quiere formar una tienda grande en la que muchas personas puedan llegar a conocer mejor de estos animales que muchos temen.
“Espero que la empresa dé buenos frutos y en un futuro tener personal para tratar de tener mayor ingreso, porque en un par de años no voy a poder con un animal de 6 a 7 metros”, explicó Delgadillo.
Ellos se han convertido en su familia numerosa a la que con esmero y dedicación cuida y alimenta, pues afirmó que “no es agotador”.
Delgadillo imparte charlas con los estudiantes sobre la vida de las serpiente y así se ha ganado el respeto y admiración de muchos nicaragüenses.
El local está ubicado en la zona oeste de la ciudad de Matagalpa, en el barrio El Tambor.
