Redacción / IP Nicaragua
En los pueblos de la región central de Nicaragua siempre se ha demandado mayor seguridad en el campo para prevenir las actividades delictivas y proteger a la ciudadanía, así como su patrimonio.
Enrique Aragón, presidente de la Asociación de Ganaderos de Camoapa, señaló que “la situación del abigeato se ha incrementado», una situación de preocupación en el sector.
El líder gremial asegura que los mayores problemas están en las zonas más alejadas, por lo que demandan seguridad.
“Son planteamientos que como productores, como dirigente del gremio, tenemos que hacer ante las entidades correspondientes de garantizar la seguridad en el campo, de garantizar la seguridad al productor, al mismo campesino para que podamos continuar incrementando y ser el pilar, como hasta hoy ha sido”, mencionó Aragón.
La productora Dina Reyes reconoce que hay una preocupación real del sector productivo sobre el tema de seguridad, especialmente para las mujeres que trabajan en el campo.
“No estamos tan segura en el campo, como mujer somos más vulnerables a muchísimas cosas», dijo Reyes.
Boaco y Chontales
Las economías de Boaco y Chontales están vinculadas predominantemente con la actividad agropecuaria, especialmente con la producción de leche y carne.
Estos dos departamentos se encuentran ubicados en el centro del territorio nacional y se identifican como una zona ganadera.
- Sigue leyendo: Los trapiches caraceños que producen los atados de dulce
Según la Unión de Productores Agropecuarios de Nicaragua (Upanic), este sector aporta el 13% del Producto Interno Bruto (PIB), garantiza el 30% en la generación de empleo y representa el 52% de las exportaciones totales del país.
El secretario nacional de la Federación de Asociaciones Ganaderas de Nicaragua (Faganic) Salvador Castillo confirma que estas actividades son el «pilar de la economía nacional».
«Ninguna otra actividad en este país tuvo exportaciones tan altas como la que se tuvo en el año 2021. Aquí se exportaron aproximadamente más de mil millones de dólares”, mencionó Castillo.
El sector ganadero impacta positivamente en la economía de las comunidades, porque son «generadores de divisas en este país», mencionó Castillo.
Sector exige mayor atención
Castillo asegura que en Nicaragua hay más de cien mil productores generando recursos, lo que exige una atención prioritaria.
«Aquí somos casi ciento cuarenta mil productores ganaderos que estamos ubicados en los diferentes lugares del país”, recordó Castillo.
Castillo señaló la necesidad de priorizar al sector ganadero y dentro de los temas de interés está la seguridad en el campo, pues considera que los delitos son parte de la realidad.
“El mal del abigeato siempre va a persistir mientras haya ganado. Nosotros pensamos que las autoridades deben seguir manteniendo la colaboración con los productores a través de lo que se conoce como seguridad en el campo. Cada productor en su zona debe pedir apoyo a las autoridades”, sostuvo Castillo.
En 2020, el departamento con mayor cantidad de denuncias de abigeato en el país fue Chontales con 214 y Boaco en el octavo lugar con 96, según datos de la Policía Nacional.
El Ejército de Nicaragua informó que en 2020 se recuperación 2,298 semovientes, 52 personas detenidas por abigeato y 8 por contrabando de ganado.
El jefe del Quinto Comando Regional de esa institución, coronel Denis Hernández, refirió que en sus recientes operativos recuperaron «alrededor de 400 reses más o menos que permitió retornarlas a los diferentes dueños».
Sector se organiza y espera resultados
Para lidiar con esta realidad el sector productivo aprovecha las redes sociales y ha creado grupos a través de WhatsApp para generar alertas y realizar denuncias.
«Estamos conectados por este sistema y que nos mantenemos informados a diario, cuando hay sustracciones de ganado bovino o caballares de nuestras propiedades, inmediatamente se da el anuncio a través de este sistema de WhatsApp», dijo Aragón.