Los familiares de los opositores encarceladas en la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), conocida como El Nuevo Chipote, denunciaron por tercera ocasión, que las autoridades policiales mantienen el régimen de aislamiento e incomunicación con sus parientes, y temen que el estado de salud de ellos empeore, por el nivel de desnutrición severa en el que se encuentran.
A través de un pronunciamiento expresaron que esta medida los mantiene en alerta, ya que la única vez (31 de agosto – 1 de septiembre) que les permitieron ver a sus familiares detenidos «fueron evidentes las condiciones extremas a las que están siendo sometidos, que están afectando gravemente su estado de salud físico y mental, y que constituyen actos de tortura».
«Ha transcurrido desde entonces casi un mes de un mutismo absoluto, en el que no hemos tenido información alguna de su estado, a pesar de que los jueces en las resoluciones de las audiencias apercibieron a Auxilio Judicial de que las visitas y entrevistas con familiares y defensa técnica deben realizarse», denunciaron.
Agregan que «de nada han valido nuestras múltiples peticiones verbales en Auxilio Judicial, en donde los escritos no nos han sido recibidos. Queremos destacar que ni la defensa, ni familiares hemos tenido ningún tipo de comunicación directa de parte de ninguna de las autoridades de la Dirección de Auxilio Judicial».
Temen por la vida de sus parientes
Con angustia y sentido de urgencia, alertan públicamente «sobre el riesgo inminente de daños irreversibles a la integridad física y psicológica de nuestros familiares. Tememos aún más por su vida».
Asimismo, señalan que a pesar de la situación de desnutrición severa y hambre en las que se encuentran sus familiares, persiste la negativa de parte de las autoridades, al ingreso de alimento, y adicionalmente denuncian que «continúan pidiendo medicinas que evidencian malestares gastrointestinales y vértigos, vinculados a su deficiente alimentación». Además «niegan el ingreso de abrigo y material de lectura».
Solicitan copias de las supuestas pruebas
Los familiares de los opositores, también sostiene que la dilación y obstaculización al ejercicio de la defensa de sus parientes continúa y que sus causas no aparecen aún reflejadas en el sistema del Poder Judicial.
«Se han solicitado las copias de las supuestas pruebas presuntamente presentadas por Fiscalía sin que dicha institución las facilite, ni acepte los escritos pidiéndolas. Esto deja a nuestros familiares en una total indefensión», reiteran.
Añaden que, en audiencia inicial, los judiciales reafirmaron el derecho a recibir las visitas de sus familiares y garantizar las entrevistas con las y los abogados defensores.
Sin embargo, «las autoridades en la DAJ omiten cumplir con lo ordenado por los jueces de audiencia. Cabe manifestar que estos derechos constitucionales, deberían ser garantizados sin necesidad de orden judicial, constituyéndose tales hechos, una abierta violación a los derechos fundamentales de nuestros familiares detenidos”. Por lo tanto «demandamos la liberación inmediata y sin restricciones de las personas presas políticas secuestradas desde mayo pasado», exigieron en su pronunciamiento.
