Redacción / IP Nicaragua
En ocasión del cuarto aniversario de la Rebelión de Abril en Nicaragua, la eurodiputada Soraya Rodríguez, del partido español Ciudadanos, abogó por una estrategia que permita «aislar» completamente al régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
«Se puede hacer más para aislar al régimen Ortega-Murillo», dijo la europarlamentaria en un webinar organizado por la Red Internacional de Derechos Humanos (RIDH) y la Red Internacional de Derechos Humanos Europa (RIDHE).
Rodríguez aprovechó su intervención para exigir al régimen la liberación de los más de 180 presos políticos y describió la cárcel de la Dirección de Auxilio Judicial, conocida como «El Chipote», como “un centro de tortura”.
“Los más de 170 presos políticos están en la cárcel sufriendo las condiciones de aislamiento, tortura (…) El Chipote se ha convertido en un centro de tortura, de esta que ya es una de las peores dictaduras de América Latina”, dijo Rodríguez.
Según el Mecanismo de Reconocimiento de personas presas políticas en Nicaragua, hasta marzo de 2022, tenían resgistrados a 181 personas detenidas, identificadas como presas políticas.
La europarlamentaria agregó que después de cuatro años de la represión de abril es importante seguir hablando de la situación de Nicaragua.
«Nunca imaginé que (el régimen) llegaría a las cuotas terribles a las que ha llegado este último año”, dijo Rodríguez.
Javier Nart: «cinismo criminal»
Durante el foro «Voces desde el exilio, voces de esperanza y Nicaragua unida para definir su futuro», el eurodiputado Javier Nart, aseveró que el problema de Ortega y Murillo “no es político, sino psiquiátrico” y que un día serán “acusados en un tribunal”.
“El problema de estos dos señores (Ortega y Murillo) no es en absoluto un problema político, es un problema psiquiátrico”, dijo el parlamentario europeo y vicepresidente de la Delegación del Parlamento Europeo para las Relaciones con los Países de Centroamérica (DCAM).
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“Este matrimonio carece del cinismo criminal de (Nicolás) Maduro que es perfectamente consciente de lo que hace, o bien, de la dictadura cubana que son también consientes de los privilegios en los que viven y quieren mantener. Aquí, este matrimonio un día se encontrará acusado ante un tribunal”, señaló Nart.
A la vez instó a que “no hay que perder jamás la lucha en favor de los derechos humanos”.
“Hay esperanza de salir de la crisis”
La eurodiputada, Alicia Homs, sostuvo que es importante no perder de vista las graves violaciones que ocurren en el país centroamericano.
«Lo que han estado haciendo no va a quedar impune», sentenció la europarlamentaria.
Y agregó que, «la solución pasa por la unidad, ya no solo de los 27 (países de la Unión Europea) sino con otros países que también están siendo muy tajantes con lo que está ocurriendo en Nicaragua, como Canadá y Estados Unidos”.
Ramón Muñoz, director de la RIDH en Ginebra y presidente de la RIDHE, expresó que pese a los cuatro largos años que han transcurrido, hay esperanza de salir de la crisis de Nicaragua por muchas razones.
Una de las razones, dijo Muñoz, es que esta fue una crisis de derechos humanos que llegó muy «rápidamente a posicionarse» en el Consejo de Derechos Humanos de Ginebra, incluso «mucho más rápido de lo que se posicionó Venezuela» en su momento.
«Fue un grito de alarma en el que contribuimos nosotros desde la RIDH en aquella época y que se logró mantener en la agenda del Consejo de Derechos Humanos y desde luego en Europa”, dijo Muñoz.
Nicaragua vive en «absoluta arbitrariedad», porque no hay justicia independiente y los órganos estatales están absolutamente cooptados por el presidente Ortega y sus aliados, denunció Muñoz.
“Hay esperanza también, porque hay una sociedad civil activa que logró salir del país con una enorme capacidad de resiliencia y que sigue trabajando por Nicaragua”, agregó el director de RIDH.
En webinar también participó la activista Haydée Castillo, miembro de la iniciativa Nicaragüenses en el Mundo; el director de la Fundación del Río, Amaru Ruiz y la periodista nicaragüense Cindy Regidor, quienes compartieron sus testimonios sobre cómo ha sido resistir y defender derechos humanos desde el exilio.
También fue invitada Wendy Flores, coordinadora del Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca Más.
