Falta de información sobre el Covid-19 vulnera el derecho de la ciudadanía, afirman médicos y empresarios

* «Es una información tan sensible que el no tenerla pudiera significar que uno se descuidará y no tomará las acciones adecuadas en el momento oportuno», dice el epodemiólogo Rafael Amador.

 

Alma Vidaurre

 

La emergencia sanitaria del coronavirus no puede limitar los derechos humanos, entre ellos el derecho a la información, que en el contexto actual de la pandemia se vuelve un componente clave para medir el impacto que tendrá la enfermedad que llegó a un país que tiene un frágil sistema de salud y vive las consecuencias de la crisis sociopolítica.

La centralización y falta de transparencia en la información que maneja el Ministerio de Salud (Minsa) en Nicaragua, no permite que a los ciudadanos les lleguen datos precisos del comportamiento de la pandemia en el país, coinciden algunos expertos consultados por IP Nicaragua.

El epidemiólogo Rafael Amador explicó que desde el ámbito de la salud, los nicaragüenses tienen “derecho a la información correcta, oportuna y necesaria”, principalmente en las actuales circunstancias, cuando se sabe que la pandemia ha cobrado la vida de cuatro personas en el país.

“Es una información tan sensible que el no tenerla pudiera significar que uno se descuidará y no tomará las acciones adecuadas en el momento oportuno que pudiera provocar la contaminación impersonal y/o la contaminación de terceras personas, que algunas de ellas pudieran desarrollar formas severas o graves de la enfermedad, incluso morirse”, explicó el epidemiólogo.

El artículo 66 de la Constitución Política de Nicaragua establece que los nicaragüenses tienen “derecho a la información veraz”. Ese derecho, según la carta magna, comprende la libertad de “buscar, recibir y difundir informaciones e ideas, ya sea de manera oral, por escrito, gráficamente o por cualquier otro procedimiento de su elección”.

Los profesionales de la salud pública de Nicaragua, también requieren información oportuna y precisa para actuar de manera rápida y efectiva.

“Al no tener información objetiva, transparente y clara, tanto los ciudadanos como las autoridades o el personal de salud y empresarios, otra gente que manejan grupos de personas, se encuentran completamente trabajando en la oscuridad, pudiendo cometer muchos errores, por no saber qué hacer por falta de información”, señala el especialista en epidemiología.

La desinformación puede provocar que el ciudadano reciba una “subinformación” que lo haga creer que hay una situación “normal” y provoque riesgos de contagio.

En Nicaragua, los informes del Minsa son escuetos y no brindan información detallada de los casos confirmados, los recuperados, localizaciones,  fallecimientos, pruebas del Covid-19 o sospechosos.

TOMA DE DECISIONES

El pasado 18 de marzo, Nicaragua informó del primer caso de Covid-19 y a la fecha se confirman 14, de los cuales 4 han fallecido, 7 pasaron a la etapa de recuperación y 3 están activos, según análisis hechos por los medios independientes que tienen que analizar la escasa información que brinda el Minsa.

La falta de información por parte de las autoridades no solo limita las acciones que puedan tomarse en el ámbito social, sino también que influye en las decisiones económicas del país que este año vive el tercer año de contracción, considera el economista Luis Murillo.

En Nicaragua, los informes del Minsa son escuetos y no brindan información detallada. Foto: Nayira Valenzuela / IP Nicaragua.

La Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides) pronosticó que la economía del país podría sufrir una contracción desde -6.5% hasta -13.7%, la cual se profundizará por la crisis sanitaria.

“La información es un insumo fundamental para tomar decisiones, no solo desde el punto de vista económico, sino del manejo familiar, el hecho que no exista información prácticamente te está dejando a ciegas para la toma de decisiones”, dijo el economista a IP Nicaragua.

LIMITA AL SECTOR PRIVADO

En el contexto de la pandemia, el sector privado del país ha desarrollado acciones para evitar poner en riesgo a los colaboradores. Se idearon nuevas formas de trabajo desde casa, esquemas de rotación o jornadas parciales, con horarios flexibles en algunos sectores.

Sergio Maltez, presidente de la Cámara de Industrias de Nicaragua (Cadin), coincide en que debería de haber una mejor información por parte de las autoridades de salud a la población, tomando como referencia los países vecinos.

Según el empresario, la información es tan importante que el no recibirla puede “afectar un derecho”.

“Uno de los deberes de los gobiernos a nivel mundial es poder facilitar y dar la información correcta y concreta a la población en general para que tome sus mejores decisiones y puedan, de alguna manera, en este caso cuando es una pandemia donde tiene que haber más cuidado, donde debe haber un distanciamiento social y eso no sucede”, enfatizó Maltez.

A pesar de que no se está recibiendo la información correcta, desde hace mes y medio el sector privado empezó a tomar las medidas de prevención a lo interno de cada empresa para proteger a los colaboradores.

“Pero no solo es en Managua y si esta información no llega a los departamentos, a las comarcas, a los municipios, como no está llegand y se está dando otro tipo de información que no es la correcta, esto de alguna manera va a poner en peligro más cantidades de vida y eso debería de revertirse”, puntualizó el presidente de Cadin.