* Organismo afirma que las inundaciones se han duplicado y las tormentas fueron los desastres más frecuentes durante las dos últimas décadas.
REDACCIÓN / IP NICARAGUA
El paso de huracanes tan poderosos y el hecho que surjan en mayor cantidad y en momentos en que la temporada de estos fenómenos climáticos ya ha terminado, es efecto del cambio climático, señaló la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en un informe.
Las agencias humanitarias de la ONU han hecho todo lo posible para prepararse para una temporada de huracanes severa, «pero ha resultado ser incluso peor de lo que pensábamos. Comenzó antes y terminó tarde. Por ejemplo, las continuas inundaciones en países como Guatemala, Honduras y Nicaragua afectarán la cosecha entrante y esto ejercerá una gran presión sobre los agricultores de subsistencia», expresó Tomson Phiri, portavoz del organismo, durante una conferencia en Ginebra, Suiza, justo cuando Iota estaba afectando a Nicaragua.
Iota impactó a Nicaragua en el Caribe Norte apenas 15 días después de que otro potente huracán, Eta, afectara la misma zona, lo que causó más de 16 muertos y cuantiosos daños materiales en este país.
El cambio climático es el principal responsable de que se hayan duplicado las catástrofes naturales en el mundo en los primeros 20 años de este siglo, según la ONU.
De acuerdo con el organismo multilateral, estos desastres naturales acabaron con la vida de más de 1,2 millones de personas desde 2000. Los datos del informe indican que entre el año 2000 y el 2019 se registraron 7,348 desastres naturales, que cobraron 1.23 millones de vidas, afectando a 4,200 millones de personas, lo que supuso un costo aproximado de pérdidas económicas mundiales de 2.97 billones de dólares.
El Océano Atlántico ha tenido dos formaciones importantes de huracanes en noviembre, en una época del año en la que la temporada normalmente está terminando. Ha habido cuatro grandes ciclones.
Desde octubre ha habido cuatro tormentas con nombre: Delta, Epsilon, Eta e Iota, todos tomados del alfabeto griego porque la lista regular de nombres de tormentas se ha agotado.
“La cantidad y fuerza de los huracanes este año se debe a varios factores, como la ausencia de un evento de El Niño, la temperatura del océano, los patrones atmosféricos, todos factores que ocurren en una era de cambio climático. Generalmente hablamos de “por encima o debajo del promedio”, pero estos promedios tienen un significado distinto al que tenían 50 a 100 años atrás”, dijo Claire Nullisa, portavoz de la Organización Meteorológica Mundial, perteneciente la ONU.
Nullis afirmó que la Organización puede afirmar con confianza que los impactos del cambio climático se están haciendo ver, por ejemplo, las marejadas son más grandes debido al aumento del nivel del mar, y las lluvias más fuertes.
Se ha hecho poco por el clima
Un estudio de la Oficina de Naciones Unidas para la Reducción de Riesgos de Desastres (UNDRR), indica que las naciones ricas han hecho poco para hacer frente a las emisiones contaminantes que están ligadas a las amenazas climáticas que constituyen la mayor parte de los desastres climáticos de hoy en día.
La ONU agrega que las inundaciones se han duplicado y las tormentas fueron los desastres más frecuentes durante las dos últimas décadas.
Según el informe, las inundaciones supusieron un 40 por ciento del total de las catástrofes afectando a 1.650 millones de personas, seguidas por las tormentas con un 28 por ciento; los terremotos, 8 por ciento y las temperaturas extremas un 6 por ciento.
Las inundaciones dejan millones de personas afectadas cada año y se convirtieron en uno de los desastres más frecuentes de las últimas década, según la ONU.
Los gobiernos, las organizaciones no gubernamentales y los equipos de las Naciones Unidas siguen enfocando sus esfuerzos en superar las graves limitaciones de acceso y a llegar a las comunidades afectadas, además de recopilar información más amplia sobre sus necesidades.
La situación en los albergues de Centroamérica están causando mucha preocupación, puesto quevarios informes que señalan decenas de miles de personas enfrentándose a condiciones extremas sin disponer de espacios adecuados, de medidas de prevención o de equipos de protección para covid-19, de acceso a los servicios de higiene o de seguridad alimentaria.
Iota es el huracán más potente de 2020 que se forma en el Atlántico. Sin embargo, no es la única catástrofe natural del año, pues cada vez son más frecuentes y devastadoras. Entre 2000 y 2019 se registraron más de 7,000 de estas, que cobraron 1,2 millones de vidas.
Pese a que los fenómenos meteorológicos extremos se han convertido en sucesos habituales en los últimos veinte años, solamente 93 países han aplicado estrategias de riesgo de desastres a nivel nacional.