* Cuando reclamó en las instancias policiales, solo le devolvieron los 180 córdobas y le dijeron que el teléfono lo habían “hecho chatarra”.
ERNESTO GARCÍA
José Rodrigo Palacios, un hombre con discapacidad auditiva y quien forzado por el desempleo se lanzó a trabajar como taxista «pirata» para ganar algo de dinero y alimentar a su familia, denunció que varios policías le robaron su teléfono celular y dinero en efectivo.
En una denuncia hecha en las oficinas de la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH), Palacios afirmó que aprovechándose de que estaba ofreciendo el servicio de taxi de forma ilegal, cuatro policías que se desplazaban en dos motocicletas le robaron su teléfono celular y 180 córdobas.
El denunciante refirió que él pasaba por el barrio 18 de Mayo con una pasajera a bordo, cuando los policías le hicieron la señal de alto.
«Los policías me dijeron que por ser taxista ilegal tenía que pagarles una multa de 3,500 córdobas. Entonces, yo les dije que no tenía esa cantidad de dinero y procedieron a registrar todo el carro y me despojaron de 180 córdobas y mi teléfono celular», relató el denunciante.
El denunciante manifestó que al reclamarle a uno de los policías la devolución de su teléfono, éste le respondió: «Te sale mejor que te vayas».
De “Herodes a Pilatos”
El denunciante continuó relatando que al percatarse de que los policías le habían robado, pidió ayuda los miembros de una patrulla que pasaba por el lugar.
Sin embargo, los patrulleros se habrían negado a auxiliarlo y le indicaron que se dirigiera al Distrito Seis de Policía, expresó José Rodrigo Palacios.
El denunciante, quien compareció este miércoles en rueda de prensa, relató que se dirigió al Distrito Seis de Policía, donde se negaron a recibirle la denuncia, aduciendo que no podían hacerlo por ser miembros de la misma institución y que debía dirigirse a la Dirección de Asuntos Internos de la Policía en Plaza El Sol.
Estando en Plaza El Sol, fue remitido a la central de Policía «Ajax Delgado», donde le exigieron presentar la factura de su teléfono celular para tramitar su denuncia, siguió relatando la víctima.
Una vez que José Rodrigo Palacios presentó la factura exigida, únicamente le devolvieron los 180 córdobas, pues supuestamente el teléfono los policías lo habían «hecho chatarra».
Aunque la acción de los patrulleros se encasilla en la figura jurídica de robo, a la víctima los jefes policiales le informaron que los uniformados solo recibirían una sanción administrativa.
Pablo Cuevas, asesor legal de la CPDH, anunció que ellos acompañarán a José Rodrigo Palacios a denunciar los hechores ante el Ministerio Público.
«La acción de los policías puede ser tipificada como un robo con fuerza o robo con intimidación», aseguró el abogado de la CPDH.
Los hechos denunciados por José Rodrigo Palacios acontecieron el pasado 30 de abril y fue hasta este miércoles que hizo pública su denuncia ante en organismo defensor de derechos humanos.
Foto portada: José Rodrigo Palacios. Cortesía / IP Nicaragua.
