La mayoría, tras su arribo a este país, fueron recibidos por sus familiares, esposas, hijos, esposos, madres que no habían podido ver a sus hijos e hijas por permanecer en las diferentes cárceles en Nicaragua.
Al menos tres familiares de un opositor fueron condenadas este jueves en Nicaragua a penas que oscilan de ocho a 10 años de prisión.
Ubilla fue detenida por la Policía la madrugada del pasado 11 de enero en su casa, dos días después el Ministerio Público la acusó ante el Juzgado Quinto Distrito Penal de Audiencia de Managua.
La Corte también incluyó en estas medidas a diez presos políticos más del régimen de Daniel Ortega y sus núcleos familiares.
Las medidas cautelares surgen tras considerar que el sociólogo se encuentra en una situación de gravedad y urgencia de riesgo de daño irreparable a sus derechos en Nicaragua.
“Es en este espíritu mariano, y reafirmando nuestra nicaraguanidad, que como ya lo hicimos el 20 de septiembre de este año, les solicitamos a nuestros gobernantes la libertad de todos nuestros presos, en aras del reencuentro de nuestras familias, y del propio país, para que, con un sentido de destino compartido, todos miremos hacia el futuro con optimismo, en una Nicaragua serena y próspera”, se lee en el comunicado en conjunto.
Los presos políticos tenían más de 84 días de no recibir visitas por parte de sus familiares y en esta ocasión que se logró, “las visitas se dieron bajo un clima de gran tensión y abuso de poder debido a que fuimos sometidos…», denunciaron.
La exposición se realiza en la Asamblea Legislativa de Costa Rica desde este lunes 14 de noviembre hasta el viernes 18.
El Cenidh denunció a través de redes sociales que la última visita que recibieron los presos políticos de sus familiares fue a finales de agosto.
Los familiares de Dora María Téllez, Miguel Mendoza, Roger Larios, Félix Maradiaga, Juan Sebastián Chamorro y otros estuvieron presentes en una conferencia de prensa virtual para exigir este derecho.
