Según la nota del Departamento de Estado, la designación implica que Alemán y miembros de su familia mencionados no son elegibles para entrar a Estados Unidos.
Voz de América
El Departamento de Estado de Estados Unidos sancionó este lunes al expresidente de Nicaragua Arnoldo Alemán por su participación en una “significativa corrupción” durante su gobierno de 1997 a 2002.
El comunicado, firmado por el secretario de Estado Mike Pompeo, dice que Alemán “estuvo involucrado en actos de corrupción, como la malversación de millones de dólares de fondos públicos para el beneficio propio y de miembros de su familia”.
“Aunque esta designación está basada en los actos durante su gobierno, la corrupción de Alemán continúa reverberando en Nicaragua hoy en día”, señala el comunicado.
“Con esta designación estoy reafirmando la importancia de la rendición de cuentas y la transparencia en las instituciones democráticas de Nicaragua”, agregó Pompeo.
Según la nota, la designación implica que los individuos mencionados y los miembros de su familia no son elegibles para entrar a Estados Unidos.
Former Nicaraguan President Aleman’s corrupt acts undermined democratic institutions in Nicaragua. I am publicly designating Aleman and his immediate family members as ineligible for entry into the United States. We remain #UnitedAgainstCorruption with our partners in Nicaragua.
— Secretary Pompeo (@SecPompeo) November 9, 2020
“Además de Alemán, el Departamento de Estado está designando a los siguientes miembros de su familia inmediata: María Fernanda Flores Lanzas, María Dolores Alemán Cardenal y José Alemán Cardenal”.
Estas designaciones, continúa la nota, reafirman el compromiso de Estados Unidos de respaldar reformas políticas clave para las instituciones democráticas de Nicaragua.
El departamento continuará usando autoridades como esta para promover la rendición de cuentas por actos de corrupción en esta región y globalmente, dijo Pompeo.
Alemán, líder del Partido Liberal Constitucionalista fue condenado por la justicia de Nicaragua por corrupción y condenado a 20 años de prisión, pero absuelto después ya con Daniel Ortega en el poder.