* En lo que va del año, al menos tres iglesias católicas han denunciado robos y profanación.
Ernesto García / IP Nicaragua
Un hombre, cuya edad oscila entre los 25 y 28 años, robó la imagen de un ángel de la capilla del Santísimo, en la catedral San Juan Bautista, de Jinotega.
El robo fue denunciado anoche por la Diócesis de Jinotega, al concluir el rezo del santo rosario.
«Pedimos a los fieles que si les llegan vendiendo (el ángel), no lo compren, porque es robado y le pertenece a Catedral», dice el aviso publicado por la Diócesis de Jinotega en su cuenta oficial de Facebook.
La denuncia de la diócesis jinotegana está acompañada de un video, en el que se observa el momento en que el hombre roba la imagen del ángel, hecha de plata.
En el video, que quedó grabado en las cámaras de seguridad de la Catedral de Jinotega, se observa que el malhechor ingresa de manera sigilosa a la capilla del Santísimo.
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Una vez que está frente al altar se quita una camisa color rojo, para quedarse vestido con una camisola color negro y pantalón azulón.
Luego el delincuente envuelve la imagen del ángel en la camisa roja y se retira del lugar sagrado.
Tercer robo en el año
Hace dos semanas, en la parroquia Nuestra Señora de Fátima, de Wiwilí, municipio de Jinotega, otros sacrílegos profanaron la capilla del Santísimo.
Así lo denunció el párroco de ese templo, José Iván Castro.
https://www.facebook.com/diocesisdejinotega/videos/745432182884960
El religioso, quien en sus redes sociales pidió misericordia celestial para quienes cometieron el acto de profanación, dijo que el hecho es en represalia, porque la iglesia «mantiene viva su voz profética».
El 13 de abril del año en curso fue profanada la parroquia Inmaculada Concepción de María, en la comunidad Los Brasiles, kilómetro 15.5 carretera nueva a León, donde la imagen de la virgen fue decapitada y la de Cristo crucificado, manchada con pintura blanca.
Por este acto de vandalismo, en las que también fueron lanzadas al suelo las hostias sin consagrar, la Policía presentó como sospechoso a Félix Martín Martínez.
Este es el único de los tres hechos de robo y profanación en templos católicos que ha sido esclarecido por la Policía.