*Fiscalía pide una condena de 11 años de cárcel para presa política acusada de secuestro extorsivo agravado.
Redacción IP Nicaragua
En los últimos tres meses, Vilma del Socorro Cruz ha vivido un calvario. Lo último que supo de la presa política trans, Celia Cruz, su hija, es que fue declarada culpable por un juez en Managua, acusada del delito de secuestro extorsivo agravado.
El juicio que inició el pasado 17 de junio concluyó la noche de este martes y al conocer el fallo, Cruz lo único que hizo fue pedir misericordia a Dios a favor del juez Séptimo Distrito Penal de Juicio, Melvin Vargas.
“Quiero decirle a este señor juez que yo le perdono en el nombre de Jesús lo que hizo con mi hijo, y lo digo de corazón, porque a veces las personas no tienen la culpa de actuar de la forma que él lo hizo y pido a Dios por él, para que Dios le perdone también a él y todo sea hecho por la voluntad de Dios”, refirió Cruz.
A Cruz se le vincula a los hechos ocurridos entre la noche del 19 de y la madrugada del 20 de abril en la comunidad de Esquipulas, en el municipio de Moyogalpa, Isla de Ometepe, cuando un grupo de agentes llegaron al área de la cancha a increpar a un grupo de jóvenes que alzaron una bandera azul y blanco en conmemoración del segundo aniversario del estallido social de 2018.
La última vez que vio a Celia fue el pasado 21 de abril, cuando varios oficiales la llegaron a traer a su casa argumentando que necesitaban hacerle una entrevista en la delegación policial. La detención de la mujer trans ocurre después de que en redes sociales circulara un video en el que se le ve reclamando al oficial de la Policía Nacional, Noel Reyes, quien minutos antes había caído de una patrulla, luego de atacar jóvenes que habían alzado la bandera.
“Sé que pronto mi hijo estará afuera, porque él no es culpable de nada de lo que lo acusan (…) Lo han declarado culpable por algo que no es cierto, mi hijo nunca secuestró a ese oficial”, dijo Cruz, mostrando un temple de hierro que demuestra su resistencia en estos tres meses en los que ha tenido que recorrer el mismo trayecto entre el Sistema Penitenciario Jorge Navarro, mejor conocido como La Modelo y los Juzgados de Managua.
No pudo secuestrarlo
El abogado Eber Acevedo, del área de defensoría jurídica de la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH), explicó que el juicio estuvo plagado de inconsistencias y que las pruebas y testigos no vinculan a Celia en la cancha a la hora del incidente con los oficiales de la Policía.
“Tres policías dijeron que (Celia) se encontraba a 30 metros de la estación policial con un parlante afuera de su negocio, poniendo música alusiva al segundo aniversario del inicio de las protestas en contra del gobierno de Daniel Ortega, es decir, no pudo dañar a nadie, no pudo secuestrar al supuesto secuestrado”, afirmó Acevedo.
El representante de la CPDH afirma que Reyes es un “supuesto secuestrado” porque es el único retenido que ha tenido privilegios por parte de sus secuestradores.
“Es el primer secuestrado que decide dónde estar secuestrado. Él pidió estar en la casa de don Douglas y don Douglas dijo que lo tuvo en su casa y le brindó medicamentos, le brindó comida; entonces no estaba secuestrado, le pidió que lo llevara donde un amigo que se llama “La Caituda” y fue llevado. En todo este proceso nunca iba Amílcar, conocido como Celia”, dijo el abogado de la CPDH.
Acevedo resaltó que es “imposible, inverosímil, inaudito” que se le haya condenado por el delito de secuestro.
Durante la audiencia, el Ministerio Público solicitó una condena de 11 años de prisión para la presa política. En este proceso también se condenó por obstrucción de funciones agravadas a los acusados Juana Estela López Alemán, Justo Emilio Rodríguez López, mientras que a Edman Jean Carlos Mora Ortiz y Edwin Javier Mora Cajina, además del delito de obstrucción de funciones se le acusó de lesiones leves.