El desfile de «Los Agüizotes» es una las más importantes expresiones culturales en Masaya, ciudad al sur de Managua, que concentra a turistas locales y extranjeros.
En Masaya, esta actividad se realiza el último viernes de octubre, en honor a San Jerónimo, el patrono local, se celebra desde mediados del siglo XX.
Cada 27 de octubre se realiza una especie de carnaval nocturno que recorre las calles y avenidas de la ciudad.
Quienes participan llevan disfraces de color negro y usan máscaras que representan personajes míticos como La Carreta Náhuatl, La Llorona, La Muerte Quirina, La Mocuana, El Padre sin Cabeza, El Cadejo, La Chancha Bruja, entre otros.
Gabriel Putoy, maestro de Masaya y exiliado en Costa Rica, explica que esta tradición que se realiza principalmente dentro del barrio de Monimbó, era anteriomente encabezada por la Cofradía del Gran Toro venado del Pueblo.
A partir de los acontecimientos del 2018, la Cofradía suspendió esta actividad tradicional, que se enmarca las fiestas patronales de Masaya.
¿Qué pasó a partir de 2018?
Según Putoy, la actividad fue suspendida debido a los acontecimientos sociopolíticos que se dieron en el 2018 y la negativa del gobierno de querer entrar en diálogo para poder normalizar la situación de Nicaragua.
«Eso está suspendido y ustedes ven que las procesiones que son propias de la Iglesia católica, que están dentro de las fiestas patronales de Masaya para esta fecha, están suspendidas», asegura Putoy.
Yubrank Suazo, excarcelado y exiliado político en Estados Unidos, afirma que el régimen ha manipulado las expresiones culturales y religiosas en el país.
La actividad tradicional en honor a San Jerónimo en Masaya ahora es promovida por el gobierno, y ya no tiene la misma participación y riqueza cultural.
«La iglesia católica no está participando en la actividad debido a las circunstancias actuales. Existe una cofradía paralela con sesgo político que ha sido financiada por el partido sandinista para manipular la identidad cultural de Masaya», afirma Suazo.
El excarcelado político recuerda que durante su niñez participaba en este desfile con gran alegría.
«Era reencontrarnos con amigos, revivir y conservar las tradiciones, las costumbres, las leyendas, los mitos de nuestra Masaya, toda una Nicaragua como son los espantos de la chancha bruja, el cadejo y un sinnúmero de expresiones mitológicas que hay en nuestro país», dice Suazo a IP Nicaragua.
«La Cofradía de Los Agüizotes Monimbó», un invento sandinista
Con el fin de continuar con estas actividades, el régimen conformó en 2019 una nueva cofradía como respuesta a crear una relativa normalidad, quienes ahora se encargan de organizar y montar la fiesta de Los Agüizotes.
«Son personeros del partido de gobierno y personas allegadas, simpatizantes, allegadas al gobierno, quienes están encabezando esta cofradía y son ellos quienes han estado al frente de estas actividades», expresa Putoy.
Suazo asegura que desde el 2018, la Gran Cofradía del Toro Venado no realiza convocatoria, primero por solidaridad con las víctimas de la represión de abril y «segundo que ya fueron atacadas posteriormente con la situación del covid-19.
«Desde esa fecha no han realizado ni el desfile de Los Agüizotes, ni tampoco lo que antecede a este desfile como es la vela del candil y terminando con el desfile del Gran Toro Venado del Pueblo, que es el teatro callejero donde se hace una sátira de todas las expresiones sociales, económicas, religiosas de nuestro país y de cualquier otra parte del mundo», explica Suazo.
Poca participación en Masaya
El maestro Putoy explica que el régimen por miedo a cualquier expresión de protesta, la actividad de Los Agüizotes se realiza más temprano que en las horas acostumbradas.
«Sacan la procesión de Los Agüizotes a las siete de la noche y culminan hasta las doce de la noche, sin embargo, ahora lo hacen temprano por temor a que las personas disfrazadas puedan hacer algún acto de protesta», señala Putoy.
Suazo asegura que aunque se sigue realizando la actividad, la participación es mucho menor en relación a la que se hacía antes del 2018.
«A pesar de que hay una afluencia de personas y que el régimen de Daniel Ortega ha querido promover o querer proyectar esa normalidad que existía antes del 2018, eso no ha logrado concretarse, hay una participación, pero no con la misma cantidad de personas ni esa riqueza digamos cultural», afirma Suazo.
En esta actividad, por decisión del párroco de la Parroquia San Jerónimo, donde está la imagen del patrono se mantiene completamente al margen.
El origen del término Agüizote
La palabra Agüizote proviene del náhuatl Ahuitzotl, que para los masayas significa «espanto cerca del agua, río o laguna».
Una noche antes de esta celebración, en Masaya realizan la “Vela del Candil”. En esta jornada se suele recordar a personajes de mitos y leyendas de Nicaragua.
Los Agüizotes inician su recorrido en las cercanías de la Iglesia Magdalena hasta llegar al Parque central.