* Mientras el exiliado obispo auxiliar de Managua, Silvio José Báez, recordó que Dios nunca está con los poderosos.
ERNESTO GARCÍA
El obispo de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez, comparó la exposición de personas al contagio del covid-19 con otros crímenes.
«En tiempos de pandemia la exposición de personas al contagio, a la muerte, es como la vida arrancada del seno de la madre (el aborto), como el asesinato, el homicidio, la violación», afirmó monseñor Álvarez en la homilía dominical pronunciada desde la catedral San Pedro, en Matagalpa.
Las duras críticas del obispo matagalpino a la exposición de personas al contagio del mortal virus, se producen justo cuando el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo siguen promoviendo actividades masivas sin guardar el distanciamiento social recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), para contener el avance de la pandemia, que actualmente sigue su paso devastador en Nicaragua, dejando centenares de muertos.
Monseñor Álvarez también criticó con dureza a quienes anteponen sus intereses materiales por encima de la vida.
«Lo que sucede es que se ha impuesto el dios dinero, el dios poder, el dios soberbio y el dios violencia, trastocando los valores de la vida cristiana», señaló monseñor Rolando Álvarez.
Mensaje a los jóvenes
En la parte final de su homilía, monseñor Rolando Álvarez instó a los jóvenes nicaragüenses «a no dejarse arrebatar su rol protagónico” en la construcción de una nueva Nicaragua.
«Sigan siendo jóvenes protagonistas de su historia, por el sitio que se han ganado en la lucha por la paz y la justicia; no se dejen robar su protagonismo», expresó el obispo matagalpino.
La exhortativa la hace monseñor Álvarez al concluir una semana donde se produjeron reacomodos en alianzas y organizaciones que adversan al régimen Ortega Murillo, produciéndose la renuncia de algunos líderes.
Monseñor Báez alza su voz
Monseñor Silvio José Báez, obispo auxiliar de Managua, desde el exilio recordó que Cristo «nunca está con los poderosos».
«Dios nunca está del lado de los poderosos: Dios siempre está del lado de los sencillos… Dios nunca está del lado de los verdugos, Dios siempre está del lado de los oprimidos», recalcó monseñor Silvio José Báez, desde la parroquia Santa Agatha, en Miami, Estados Unidos.
Monseñor Báez, quien permanece en el exilio desde hace 14 meses, recordó que quienes se han consagrado a la vida religiosa, al igual que los profetas, solo se deben a Dios y no tienen por qué depender de ningún poder terrenal.
«La voz del profeta siempre va a incomodar al injusto, que niega la presencia de Dios y empequeñece al hombre», subrayó monseñor Silvio José Báez.
Foto de portada: Facebook Diócesis de Matagalpa.