El delantero argentino decidió continuar en el club blaugrana al menos hasta el próximo año, que es cuando termina su contrato.
Harold Briceño Tórrez
Llegó a su fin la novela de drama y suspenso protagonizada en las últimas semanas por Lionel Messi y el Barcelona. El delantero argentino anunció esta mañana que continuará en el conjunto blaugrana al menos hasta el 30 de junio del próximo año, que es cuando terminará su actual contrato.
“Nunca iría a juicio contra el Barcelona porque es el club de mi vida. Si esa es la única vía para salir, me quedo», dijo el máximo goleador de la entidad azulgrana en una entrevista con en Goal.com.
Y es que para poder salir del Barcelona, como había manifestado que era su deseo el pasado 25 de agosto por medio de un burofax, Messí debía denunciar su actual contrato con el club, lo que acabaría en una larga batalla en los tribunales, que sería un duro golpe tanto para él como para el equipo, con el que tiene una relación de veinte años.
Tras una temporada en la que el Barcelona se quedó sin títulos y que acabó con la penosa derrota 2-8 ante el Bayern de Munich en los cuartos de final de la Liga de Campeones de Europa, Messi, convencido de que el Barsa no le ofrece un proyecto con el que al menos pueda competir por la “Champions” decidió anunciar su deseo de salir del club, remitiéndose a una cláusula de su contrato que le permitía dejar el equipo cada fin de temporada.
Ante su posición, el presidente del Barcelona, Josep Bartomeu, le dijo en una reunión de hace un par de días al padre y también representante del jugador, Jorge Messi, que la cláusula había quedado invalidada el pasado 10 de junio y que por lo tanto no estaba dispuesto a negociar la salida de “Lío”. Tal postura, que ponía como única alternativa una disputa en los tribunales, obligó a Messi a replantearse la situación y finalmente decidir quedarse al menos hasta el 30 de junio del próximo año.
La razón de quedarse
Diez días después de haber enviado el burofax en el que anunciaba si decisión de salir del equipo, Lionel Messi, que había permanecido callado, rompió el silencio este viernes.
«Voy a seguir en el club porque el presidente me dijo que la única manera de marcharme era pagar la cláusula de 700 millones, que eso es imposible, y que luego había otra manera que era ir a juicio. Yo no iría a juicio contra el Barsa nunca porque es el club que amo, que me dio todo desde que llegué, es el club de mi vida, tengo hecha aquí mi vida, el Barsa me dio todo y yo le di todo, jamás se me pasó por la cabeza llevar al Barsa a juicio», dijo el máximo goleador de la historia del Barcelona.
En su entrevista con Goal.com manifestó que a pesar de haber declarado su intención de salir del club, ahora que ha decidió quedarse «mi actitud no va a cambiar por más que me haya querido ir. Voy a dar lo mejor. Siempre quiero ganar, soy competitivo y no me gusta perder a nada. Siempre quiero lo mejor para el Barsa, para el vestuario y para mí”.