Jonathan Loáisiga, Cheslor Cuthbert, Alex Blandino y Erasmo Ramírez fueron incluidos por sus respectivas organizaciones para pelear por un puesto en el equipo grande.
Harold Briceño Tórrez
Durante los próximos días, los nicaragüenses Jonathan Loáisiga (Yanquis de Nueva York), Cheslor Cuthbert (Medias Blancas de Chicago), Erasmo Ramírez (Mets de Nueva York) y Alex Blandino (Rojos de Cincinnati), tendrán el desafío de rendir al máximo nivel en el Campamento de Verano de la MLB, para fabricarse un espacio en el roster de 30 peloteros con el que sus respectivas organizaciones iniciarán la temporada del 2020 de Grandes Ligas, una de las más cortas de la historia.
La campaña del mejor beisbol del mundo, que a causa del covid-19 ha sido recortada a 60 juegos, iniciará el 23-24 de julio, mientras tanto, los equipos han iniciado su preparación con una lista de 60 peloteros, la cual será reducida a la mitad para el día inaugural.
De los cuatro nicaragüenses que fueron tomados en cuenta para pelear por un puesto en el llamado Spring Training 2.0, Jonathan Loáisiga, el tirador derecho de los Yanquis de Nueva York, es el que más posibilidades tiene de quedarse en el equipo grande.
Y es que antes de que la temporada fuera suspendida como consecuencia de la pandemia, Jonathan era considerado un candidato fuerte para ocupar el quinto puesto en la rotación de los Yanquis, que este año será encabezada por el brillante lanzador Gerrit Cole.
En la primera parte del Spring Training 2020, antes de que la temporada fuera pospuesta por la rápiday peligrosa propagación del Covid-19, Loáisiga demostró su potencial al lanzar para 2.70 a lo largo de 10 episodios completos divididos en cinco juegos, funcionando en tres de ellos como abridor. En tal recorrido sorprendió al ponchar a 14 rivales y solo otorgar una base por bolas.
Es probable que los Yanquis lo usen como abridor y relevista a lo largo de la temporada.
EL CASO DE CUTHBERT
Los Medias Blancas de Chicago decidieron incluir en su lista de jugadores para el Campamento de Verano a Cheslor Cuthbert, a quien en enero de este año firmaron como agente libre con un contrato de Ligas Menores y con invitación al Spring Training.
La inclusión de Cuthbert en el roster de los Medias Blancas, se debe en gran medida a su notable actuación en la primera mitad de los entrenamientos primaverales, porque a lo largo de 14 juegos y en un total de 27 visitas al cajón de bateo, conectó 11 imparables, entre ellos dos dobletes y tres jonrones, para un promedio ofensivo de 407 puntos.
La presencia de Cheslor en el roster final de la organización no es tan segura como la de Jonathan con los Yanquis, pero de continuar con el accionar ofensivo que mostró meses atrás, bien podría sorprender adueñándose de un espacio. De lograrlo, estaría en su sexta campaña como ligamayorista, y la primera con otro equipo que no sean los Reales de Kansas City.
ERASMO, A FAJARSE
Después de que la temporada anterior solo registrara una aparición con los Medias Rojas de Boston en la MLB, Erasmo Ramírez fue firmado como agente libre con un contrato de Ligas Menores e invitación al Spring Training por los Mets de Nueva York, con quienes busca una nueva oportunidad a sus 30 años.
Si bien es cierto no viene de una gran campaña en el 2019, su actuación en los entrenamientos primaverales de este 2020, en los que registró balance de una victoria sin derrotas y efectividad de 1.13 al permitir solo una carrera limpia en ocho entradas completas, le valió para ser nuevamente considerado por los Mets, quienes también lo califican como un lanzador experimentado, pues ya suma ocho años en la MLB.
Si a su largo recorrido en este nivel, Erasmo, quien durante el parón por la pandemia se estuvo preparando en Estados Unidos, le suma actuaciones convincentes en el Campamento de Verano, tendrá grandes opciones del volver a la Gran Carpa.
BLANDINO TIENE POTENCIAL
Alex Blandino quiere sumar su tercera temporada en el mejor beisbol del mundo este 2020, y la oportunidad le ha sido dada, porque los Rojos de Cincinnati lo incluyeron en su lista para los entrenamientos de verano. Claro, tendrá que pelear por un puesto.
Su versatilidad a la defensiva y la capacidad ofensiva que mostró en el Spring Training, son las dos razones por las que fue considerado por su organización.
Capaz de jugar con solvencia en la mayoría de las posiciones, Blandino presentaba un promedio ofensivo de 458 puntos al momento que los entrenamientos primaverales fueron suspendidos por la crisis de salud que atravesaba el mundo.
Hay mucha competencia para Blandino en los Rojos, pero si logra ser consistente desde el cajón de bateo en el Summer Camp, el equipo bien podría fabricarle un espacio, haciendo caso a la vieja frase de que “el que batea tiene que jugar”.
