El Gobierno de Costa Rica confirmó esta mañana que el país registra 18 casos de la variante ómicron de la covid-19.
El Instituto Costarricense de Investigación y Enseñanza en Nutrición y Salud, Inciensa, confirmó esta mañana 14 casos nuevos de la variante Ómicron del SARS-CoV-2, para un total de 18 casos confirmados en el país.
Los casos más recientes corresponden a 12 costarricenses y dos extranjeros de nacionalidad colombiana e italiana. El rango de edad está entre los ocho y 58 años y la distribución por sexo es de nueve mujeres y cinco hombres.
Según la información disponible en la boleta que acompaña a las muestras, dos de las personas afectadas presentaron antecedente de viaje reciente a Estados Unidos.
Las autoridades de Costa Rica señalan que los casos se distribuyen en cuatro provincias: en San José se detectaron casos en los cantones de Goicoechea, Moravia, Curridabat y el cantón Central.
En Alajuela se detectaron casos en el cantón Central y en Grecia; en Guanacaste en los cantones de La Cruz y Liberia y en la provincia de Heredia en el cantón Central.
De acuerdo con la información recibida en la boleta que acompaña la muestra, los pacientes no habían requerido hospitalización hasta el momento de la toma de muestra, diez de ellos se encontraban sintomáticos, entre los síntomas referidos destacan dolor muscular y de articulaciones, dolor de cabeza, fiebre, tos y congestión nasal.
El Inciensa, con el apoyo de la red nacional de laboratorios, continuará realizando la vigilancia genómica del SARS-CoV-2 en Costa Rica con el fin de mantener informadas a las autoridades de salud y a la población en general respecto a la circulación de las variantes del virus en el país.
El pasado 20 de diciembre, el Ministerio de Salud de Costa Rica confirmó este domingo la detección del primer caso de la variante ómicron de SARS-CoV-2 en un paciente menor de edad que viajó a Estados Unidos con su familia.
Este martes, la Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió de que la rápida propagación de ómicron provocará “un gran número de hospitalizaciones” de enfermos de covid-19, pese a ser una variante ligeramente menos peligrosa que su predecesora.
“Es demasiado pronto para decir si la ola de ómicron será más o menos grave que la de Delta”, destacó Catherine Smallwood, una de las principales responsables de OMS Europa, “aunque los datos preliminares en las poblaciones más afectadas de Europa (Inglaterra, Escocia, Dinamarca) muestran que ómicron podría dar lugar a un menor riesgo de hospitalización en comparación con delta”.
La especialista pidió tomar los datos preliminares “con cautela”, ya que en la actualidad los casos observados se refieren sobre todo a “poblaciones jóvenes y sanas en países con altas tasas de vacunación”.
“Todavía no hemos visto el impacto que ómicron tendrá en los grupos más vulnerables como las personas mayores que aún no han recibido una vacunación completa”, afirmó la experta.