Redacción / IP Nicaragua
La angustia y el temor de siete nicaragüenses que fueron secuestrados por un cártel de la droga en México cuando emigraban hacia Estados Unidos llegó a su final. La noticia de que habían sido liberados se conoció inicialmente a través de las redes sociales, pero posteriormente la versión fue confirmada por amigos cercanos a la familia.
La información de que habían sido secuestrados por un grupo de narcos en México igual se conoció algunos días a través de las redes sociales. Los mensajes decían: “cartel mexicano secuestra a siete jóvenes, tres de Matagalpa y cuatro de Managua”.
La zozobra de las familias de los nicaragüenses duró unos seis días, pues exigían 70 mil dólares para liberarlos, 10 mil por cada uno, amenazando que de no cumplir con esta exigencia el desenlace sería fatal.
Dos jóvenes matagalpinas y una menor corrieron el riesgo
Gerlenis Jiménez emprendió el peligroso viaje junto a su pequeña hija. Su anhelo era llegar a Estados Unidos para ayudar a su familia. María Teresa Delgadillo también compartía el sueño americano. Ambas son habitantes de la zona sur de la ciudad de Matagalpa.
Jiménez y Delgadillo sabían del riesgo que ellas corrían, pero el desempleo y pobreza que se vive en Nicaragua las obligó a salir de su país, así como miles de nicaragüenses lo han hecho en los últimos años al no tener otras oportunidades.
Antes de decidirse a emigrar a Estados Unidos, Delgadillo estuvo tres años en Costa Rica, siempre teniendo la ilusión de ayudar a su mamá, Clementina Delgadillo, una vendedora ambulante en el mercado Guanuca de Matagalpa, quien es habitante el barrio Lucia Mantilla y madre soltera de tres hijos.
Siguen en México y aún tienen temor
Nancy Ferrufino, amiga de la familia, estuvo en el momento preciso cuando María Teresa Delgadillo se puso en contacto con su mamá Clementina Delgadillo, expresándole que había sido liberada. Delgadillo contó a su madre que todos se encuentran bien.
“Ya tuvimos la oportunidad de hablar con ella (María Teresa Delgadillo) para saber que realmente está bien y ha sido muy emotivo, hemos llorado de alegría, de agradecimiento a Dios sobre todas las cosas, porque Él ha sido quien ha abierto estas puertas, todos están bien, la niña, los muchachos gracias a Dios”, exclamó Ferrufino.
La solidaridad entre amigos
Las redes sociales se vieron invadidas de publicaciones que hacían amigos y familiares de Gerlenis Jiménez, solicitando la ayuda económica de matagalpinos para reunir los 10 mil dólares que los secuestradores le exigían a su progenitora.
Josseling Guevara, amiga de la familia Jiménez, organizó la colecta y se dispusieron a elaborar algunas alcancías con fotos de Gerlenis Jiménez para reunir la cantidad que los secuestradores demandaban, sin embargo, no pasó mucho tiempo para conocerse la noticia de que ya habían sido dejados libres.
“Desde el primer momento estuve cerca de la familia, preparamos todo para los tarros y aunque ellos siguen en México ya están en un mejor lugar, ya están bien, eso se nos hizo saber”, expresó Guevara.
Según amigos cercanos a la familia de las jóvenes migrantes se envió solo parte del dinero que los delincuentes exigían. #Sólo el poder de Dios hizo eso posible”, afirmaron.
Se espera que en los próximos días este grupo de jóvenes continúe su camino hasta llegar a su destino, donde los aguardan amigos y familiares en los Estados Unidos.
Estos son algunos de los riesgos y malas experiencias a las que están expuestos muchos nicaragüenses que cruzan a otros países buscando oportunidades que no encuentran en su propia patria, dijo la familia.