Aumenta drama de nicaragüenses en la frontera de Peñas Blanca

ERNESTO GARCÍA

Como una “crueldad” calificó el activista de los derechos humanos Gonzalo Carrión la actuación del Gobierno de Nicaragua contra los centenares de nicaragüenses a quienes con policías antimotines les impiden regresar al país.

«Lo que hemos podido comprobar en la frontera de Peñas Blanca es una situación de crueldad con los nicaragüenses. Hemos visto a mujeres de rodillas implorar a los antimotines de la Policía (nicaragüenses) que les permitan ingresar a su territorio nicaragüense», relató Gonzalo Carrión, director del colectivo de derechos humanos «Nicaragua Nunca Más».

Gonzalo Carrión señaló que el drama de los nicaragüenses en el puesto fronterizo de Peñas Blanca  por regresar a sus hogares después de haber quedado sin empleo en Costa Rica por la pandemia del covid-19 se agrava con el pasar de las horas, porque siguen llegando más compatriotas a ese sitio urgidos por regresar al lado de sus familias.

Asedio a la CPDH

En auxilio de los activistas de los migrantes nicaragüense también llegó la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH) a quienes les fue impedido entrevistarse con los funcionarios de Migración y Extranjería para abogar por los nicaragüenses varados en ese puesto fronterizo.

Pero la repuesta fue ser rodeados por policías nicaragüenses, quienes con arrogancia les exigieron retirarse del lugar.

Anoche la Policía costarricense repartió comida entre los centenares de migrantes nicaragüenses a quienes el gobierno de Daniel Ortega y Rosario Murillo no les permite ingresar a su propio país.

El pasado 14 de julio, la Oficina Regional para América Central y República Dominicana (Oacnudh), exhortó al gobierno de Nicaragua a agilizar los procesos migratorios para asegurar el retorno de sus conciudadanos, como un derecho que tienen, incluso durante la pandemia.

“La Oficina insta a los Estados de la región a agilizar los procedimientos y la coordinación entre ellos para asegurar el retorno expedito, seguro y digno de las personas, priorizando aquellas en situación de vulnerabilidad como niñas, niños y mujeres embarazadas y adultos mayores, asegurándose de mantener juntos a los miembros de una misma familia”, señaló Oacnudh.

En ese momento, la Oacnudh dijo conocer que alrededor de 45 personas migrantes nicaragüenses se encontrarían varadas en la frontera de Guatemala con Honduras y, más de 400 personas en la frontera de Panamá con Costa Rica, incluidas niñas, niños y mujeres embarazadas.