SAN JOSÉ, COSTA RICA — La crisis nicaragüense que se profundiza cada año más en el país centroamericano no tiene una posibilidad cercana de solucionarse, o al menos no por medio de un diálogo con Estados Unidos- su principal socio comercial-, según dijo el mandatario izquierdista Daniel Ortega este martes.
Durante el discurso en ocasión por el 43 aniversario de la popular revolución que puso fin a la dictadura de Anastasio Somoza en 1979, Ortega descartó un diálogo asegurando que “sería como ponerse una soga al cuello”.
La respuesta de Ortega se dio tras la intervención previa del primer ministro de San Vicente y las Granadinas, Ralph Gonsalves, quien fue el único jefe de Estado presente en el evento y quien le consultó a Ortega por qué no tenía un acercamiento con Washington.
“Nosotros quisiéramos tener buenas relaciones con Estados Unidos, pero es imposible”, ha dicho el mandatario luego de haber hecho una amplia reseña de acontecimientos pasados en donde acusó a Washington de supuestamente intervenir en Nicaragua.
“No hay diálogo, es imposible un diálogo, los diálogos son para ponerse la soga al cuello a uno, o que uno se ponga la soga al cuello”, agregó Ortega, quien lleva más de 15 años consecutivos en el poder y quien recientemente se impuso para un nuevo período de cinco años, tras haber puesto tras las rejas a todos los aspirantes a la presidencia.
Según los analistas políticos consultados por la Voz de América, el discurso de Ortega evidencia un rechazo a una salida “pacífica o negociada” de su gobierno y en lugar de ello apuesta a profundizar la crisis política que ha comenzado a aumentar los niveles migratorios a niveles históricos, superando incluso los de la década de los 80, cuando Nicaragua vivía una guerra.
Solo en el primer semestre de 2022, la patrulla fronteriza de Estados Unidos reflejó un incremento sustancial de un 300% de nicaragüenses que buscan “el sueño americano”, mientras que en Costa Rica hay unos 140.000 solicitantes de refugio a la espera.
“Ortega enfrenta a su propio pueblo y se eligió en un proceso electoral sin votantes y sin opositores en 2021 y además de eso, rechaza de manera tajante y hasta vulgar lo que le dijo Gonsalves, que de alguna manera le sugirió una salida negociada con los americanos”, analizó el exdiputado Eliseo Núñez a la VOA.
Ortega apoya la invasión de Rusia de Ucrania
Además Núñez criticó el apoyo de Ortega a la guerra que Rusia empezó en Ucrania alegando que “se buscaba el fin de la hegemonía” de Estados Unidos en el mundo.
“Llama la atención que Ortega calificó la invasión de Rusia a Ucrania como la guerra de la humanidad, o la lucha contra la hegemonía, un calificativo totalmente absurdo cuando Rusia está matando a niños ucranianos”, dijo Núñez al respecto.
Relaciones tensas
Las relaciones entre Nicaragua y Estados Unidos han estado tensas desde 2018 que se produjeron unas violentas protestas contra Ortega que dejaron más de 300 muertos, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Ortega ha señalado que dichas manifestaciones fueron un intento de golpe de Estado contra su gobierno, las cuales, según afirmó en su momento, fueron auspiciadas por Estados Unidos y otros actores de la comunidad internacional.
Estados Unidos, quien ha negado las acusaciones del mandatario y que ha pedido firmemente a Ortega que respete los derechos humanos, ha impuesto una serie de sanciones contra el círculo cercano del mandatario izquierdista.
También Washington ha reiterado en varias ocasiones su disposición a dialogar con el gobierno de Ortega con el fin de encontrar una salida a la crisis del país.
Nota de la VOA