Un sector de Ticuantepe, ubicado en carretera Masaya, se encuentra en cuarentena tras detectarse la presencia del caracol gigante africano.
El Instituto de Protección y Sanidad Agropecuaria (IPSA) emitió este lunes 28 de agosto a través de La Gaceta, Diario Oficial de Nicaragua, una alerta fitosanitaria en la que se declaró la cuarentena.
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“Declarar a partir del punto inicial de detección, localizado en el municipio de Ticuantepe, Managua, un área bajo cuarentena, conformando un anillo de contención fitosanitaria de un radio de un kilómetro para su control y erradicación oficial, y evitar su dispersión”, según la publicación.
El IPSA declaró además al caracol como una «plaga transitoria accionable en curso de erradicación». Dijo además que declaran «a partir del punto inicial de detección, localizado en el municipio de Ticuantepe, Managua, un área bajo cuarentena, conformando un anillo de contención fitosanitaria de un radio de un kilómetro para su control y erradicación oficial, y vitar su dispersión».
El 25 de marzo las autoridades sanitarias de Nicaragua alertaron de la presencia del caracol africano y pusieron a disposición un número de teléfono 2298-1330 para que la población denuncie su presencia.
¿Qué es el caracol africano?
El caracol gigante africano (Achatina fulica), originario del este de África, ha logrado conquistar América, Asia, Oceanía y Europa de la mano del hombre, quien facilitó su rápida dispersión, fundamentalmente para su cría como alimento, pero también a través del traslado involuntario adherido a vehículos y a cajones usados en cosechas, a su uso como carnada, al comercio de plantas en macetas –donde se encuentran los huevos–, y a su tráfico como mascota.
El caracol gigante africano puede transmitir una gran cantidad de parásitos a través de su baba. Su presencia no solo amenaza la flora y a especies nativas, también es un riesgo para los humanos.