Acusación contra monseñor Rolando Álvarez genera condena a nivel nacional e internacional

El subsecretario para Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado de Estados Unidos, Brian Nichols, reaccionó este miércoles a la acusación presentada por la Fiscalía por «traición a la patria»  y «ciberdelito» contra el obispo de la Diócesis de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez.

«Monseñor Rolando Álvarez es un líder espiritual para millones de nicaragüenses y defensor del diálogo y reconciliación. Representa lo mejor del pueblo nicaragüense. Acusarlo de conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional es el acto cínico de un Estado autoritario”, escribió Nichols en su cuenta de Twitter.

Este martes, el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, a través de la Fiscalía acusó a monseñor Álvarez “por los delitos de conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional y propagación de noticias falsas en perjuicio del Estado y la sociedad nicaragüense”.

La acusación se presentó en los Juzgados de Distrito Penal de Audiencia de Managua, donde se observó al obispo vestido de camisa azul y pantalón negro y con evidente pérdida de peso.

Obispo Silvio Báez: «Es un crimen»

El obispo auxiliar de Managua y exiliado en Estados Unidos, Silvio Báez, también reaccionó a la acusación contra monseñor Álvarez, la cual calificó de “un crimen lo que hace la dictadura de Nicaragua contra mi hermano monseñor Rolando Álvarez».

“Ultrajándolo se condenan a sí mismos ¡Rolando, no estás solo! Estamos contigo, rezamos por ti y exigimos tu libertad. Contigo está Dios, quien no abandona a sus profetas.”, agregó Báez en su Twitter.

La audiencia inicial contra monseñor Álvarez fue programada para el próximo 10 de enero de 2023. Además, le asignaron un defensor público, según una nota de prensa del poder judicial.

Monseñor Álvarez, también administrador apostólico de la Diócesis de Estelí y miembro de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) es investigado por intentar “desestabilizar el país”, en medio de las tensas relaciones que existen entre la Iglesia católica y el Gobierno desde las protestas opositoras del 2018.

Su detención ocurrió dos semanas después de que la Policía sitiara la Curia en Matagalpa, donde permaneció encerrado junto con otras personas, entre estas seis religiosos que ahora están también presos en Managua.

«Sacerdotes han sido blanco de ataques desde 2018»

Por su parte, el Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca Más repudió la acusación «infame» en contra de Álvarez.

«Obispos y sacerdotes han sido blanco de ataques desde 2018 cuando fueron golpeados y obligados al exilio como monseñor Silvio Báez, el padre Edwing Román y otros sacerdotes, mientras que otros religiosos han sido condenados o guardan cárcel esperando juicios con acusaciones falsas», alertó ese Colectivo en una declaración.

A su vez el Colectivo exigió “el cese de estas graves violaciones de derechos humanos, en particular la libertad religiosa, que persiguen callar, dar cárcel, exilio o cementerio contra un pueblo que merece libertad, verdad y justicia”.

Deterioro físico de monseñor Álvarez

El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), denunció que en las imágenes difundidas por medios oficialistas “puede verse el deterioro físico de monseñor Álvarez, quién está pálido y delgado”.

El organismo, a la vez, llamó a líderes de la Iglesia católica de Nicaragua “que expresen su posición respecto a estos hechos criminales del régimen”, especialmente al cardenal Leopoldo Brenes, arzobispo de Managua.

La activista y defensora de derechos humanos nicaragüense Bianca Jagger acusó a Ortega de iniciar un infame proceso contra el obispo Rolando Álvarez por “conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional” después de tenerlo cautivo por más de 130 días.

“No abandonemos a Monseñor Álvarez”, escribió en su cuenta de Twtter.

Jagger también expresó su preocupación por las imégenes del obispo con visible deterioro físico, adelgazado y pálido.

“Lo despojaron de su sotana y lo obligaron a usar ropa civil para sentarse en la silla del acusado para enfrentar cargos infames después de 130 días de cautiverio”, denunció.