*De esta manera, el gobierno de Daniel Ortega ha concretado los tres proyectos de leyes, con los que según se pretende implementar el totalitarismo en el país, como son la Ley de Regulación de Agentes Extranjeros, la Ley Especial de Ciberdelitos y la cadena perpetua que se incorporó este martes al artículo 37 de la Constitución Política.
Redacción / IP Nicaragua
Los diputados sandinistas aprobaron este martes la reforma al artículo 37 de la Constitución Política para instaurar la cadena perpetua por “crímenes de odio”, cumpliendo con la primera parte de lo que señala la Carta Magna, que indica que toda reforma debe aprobarse en dos legislaturas.
El jurista y analista político José Pallais Arana, explicó que esa reforma constitucional no es suficiente para permitir que en el país pueda aprobarse la pena de cadena perpetua, pues señala que hay otros artículos constitucionales que no fueron reformados e impiden que esa legislación sea aprobada una vez que se concluya con la segunda fase de la legislatura, en enero del próximo año.
“Debe reformarse también el artículo 39, que establece que el Sistema Penitenciario tienen por objetivo la transformación, reeducación del interno, del que ha delinquido y quien es condenado a cadena perpetua, no tiene ninguna oportunidad de reintegrarse a la sociedad, porque pasa de la cárcel al cementerio”, argumentó Pallis.
También recordó que dichos artículos están establecidos en el Pacto de San José, “es decir, que son violatorios a los derechos humanos”.
De esta manera, el gobierno de Daniel Ortega ha concretado los tres proyectos de leyes, con los que según los opositores, asociaciones, organizaciones y la comunidad internacional, pretende criminalizar las acciones ciudadanas e implementar el totalitarismo en el país, como son la Ley de Regulación de Agentes Extranjeros, mejor conocida como “Ley Putin”, la Ley Especial de Ciberdelitos o “Ley Mordaza” y la cadena perpetua, que se incorporó al artículo 37 de la Constitución Política, para ser aplicada como una “excepcionalidad” cuando se cometan “crímenes de odio”.
Grave retroceso
Para Álvaro Leiva, secretario ejecutivo de la Asociación Nicaragüense Pro- Derechos Humanos (Anpdh), con la aprobación de la reforma para instaurar la pena de cadena perpetua, el país ha tenido un grave retroceso en materia penal, constitucional y sobre todo en los instrumentos jurídicos internacionales.
“No es un instrumento (la cadena perpetua) de querer mejorar la justicia en Nicaragua. Esto tiene un trasfondo político, para los que él (Daniel Ortega) considera sus enemigos, críticos de su régimen que ha promovido dolor, luto y derramamiento de sangre entre los nicaragüenses”, manifestó el activista de los derechos humanos.
“Estamos ante un régimen totalitario en retroceso de más de cien años en la legislación de Nicaragua, imponiendo una pena violatoria, clarísimamente violatoria de los derechos humanos en nuestro país y con el objetivo de imponer el terror a los que se opongan al régimen dictatorial”, coincidió Pallais.
Por su parte, Leiva considera que esta reforma no busca castigar delitos severos, sino que fue aprobada únicamente para castigar a aquellos que reclamen sus derechos constitucionales, derechos humanos, pero principalmente aquellos derechos políticos y civiles.
“Esta ley es un instrumento más de represión, un instrumento más de castigo hacia los nicaragüenses por parte de un régimen que no demuestra hasta el día de hoy una calidad política de mejorar la radiografía de los derechos humanos, que tiene el estado de Nicaragua como una obligación con el derecho internacional a través del sistema interamericano y a través del sistema universal de Naciones Unidas”, comentó el secretario ejecutivo de la Anpdh.
Ortega desafía
En menos de un mes, el gobierno de Daniel Ortega aprobó en la Asamblea Nacional la Ley de Agentes Extranjeros y la Ley Especial de Ciberdelitos, pese a que el 8 de octubre el Parlamento Europeo (PE) emitió una resolución que rechaza ambas propuestas de ley, por ser consideradas violatorias de los derechos humanos y advirtió que de aprobarse, impondría sanciones.
Los diputados europeos, además. rechazaron, en ese momento, la intención de querer instaurar la pena de cadena perpetua para castigar a quienes cometan “crímenes de odio”, entre los que incluyen las acciones de protestas opositoras, como lo dijo Ortega en un discurso el pasado 15 de octubre.
Sin embargo, dicha legislación fue aprobada este martes.
El jurista Opositor, José Pallais señaló que Ortega ha pasado por encima de los llamados y de las consideraciones que ha hecho la comunidad internacional y que pretende continuar violentando los derechos de los nicaragüense e irrespetando los acuerdos internacionales.
“Ortega apuesta a poder sostenerse con la fuerza, con la violencia, apuesta a que está capacitado para evitar cualquier reclamo, cualquier protesta. Considera que tiene la capacidad militar de evitar cualquier riesgo de explosión social y se atiene a eso. También está haciendo un cálculo de que la comunidad internacional se cansará de reclamarle y que al final, tolerarán la existencia de un régimen totalitario, violador de los derechos humanos en Centroamérica, pero para mí es un mal cálculo”, dijo Pallais.
Tres millones de firmas
Para la aprobación de la pena de cadena perpetua, los diputados sandinistas alegaron que la reforma al artículo 37 de la Constitución Política se debía a la demanda de la población, que fue expresada a través de más de 3 millones de firmas en apoyo a la propuesta de reforma.
- Leer más: Coalición Nacional denuncia «Estrategia Nacional de Ciberdelitos» ante comunidad internacional
Una comitiva sandinista entregó el pasado 27 de octubre ante el plenario de la Asamblea Nacional, 3 millones de firmas para apoyar la aplicación de la cadena perpetua, incluyendo las acciones de los opositores.
No obstante, se conoció que los trabajadores del Estado y familiares de éstos, fueron obligados a firmar la misiva.
Foto portada: El Nuevo Diario.