Voz de América
Estados Unidos extendió el lunes las advertencias de viaje a una serie de países de África y los Emiratos Árabes Unidos, mientras que Portugal, España y Hong Kong anunciaron nuevas restricciones a los viajeros de Gran Bretaña, en línea con los esfuerzos para contener la variante delta del COVID-19.
Hong Kong dijo que prohibiría la entrada de todos los vuelos de pasajeros desde Gran Bretaña a partir del lunes. Gran Bretaña está registrando el 95% de sus casos de COVID-19 con la variante delta.
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De acuerdo con el Centro de Recursos de Coronavirus de la Universidad Johns Hopkins, Gran Bretaña registró más de 14.000 nuevos casos de coronavirus en los últimos días. Recientemente, el país alivió algunas de las restricciones cuando el país alcanzó una vacunación completa de casi el 48% de la población.
Varios de los principales funcionarios de defensa británicos están en un aislamiento voluntario después de asistir a una reunión la semana pasada con el general Nick Carter, jefe de las fuerzas armadas, quien dio positivo a una prueba de COVID-19.
El secretario de Defensa, Ben Wallace, y los jefes de la Marina y el Comando Estratégico están todos en aislamiento voluntario después del resultado positivo de Carter.
El Departamento de Estado de EE. UU. dijo el lunes que había elevado las advertencias de viaje a los Emiratos Árabes Unidos, Liberia, Uganda, Mozambique y Zambia al Nivel 4 — «No viajar» — debido a los aumentos de infecciones de COVID-19 en esos países.
La capital de los Emiratos, Abu Dabi, anunció el lunes que una amplia serie de espacios públicos se abrirán pronto a quienes tengan prueba de vacunación.
Moscú anunció medidas similares el lunes, especialmente en restaurantes y cafés, en medio de nuevas infecciones en la capital rusa.
Sudáfrica también está experimentando un incremento de infecciones de COVID-19. Las autoridades de salud reportaron 15.000 nuevos casos y 122 muertes el domingo.
El presidente Cyril Ramaphosa dijo el domingo que la variante delta era probablemente la causa del repunte de casos.
Y en Australia, la principal ciudad, Sídney, está bajo confinamiento en medio de un creciente brote de COVID-19.
