Tomado de La Voz de América
Cinco presidentes latinoamericanos expresaron su compromiso con reducir las emisiones de carbono y el uso de combustibles fósiles en la cumbre de cambio climático organizada por el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, donde decenas de líderes de todo el mundo acordaron reducir las emisiones de dióxido de carbono.
Las dos principales potencias mundiales, Estados Unidos y China -responsables de casi la mitad de todas las emisiones de gases del efecto invernadero- establecieron que cortarán casi a la mitad sus emisiones para el 2030.
Los presidente de Chile, Colombia Brasil y Argentina expresaron sus planes para reducir las emisiones de sus países y para hacer una transición poco a poco hacia energía renovables.
El líder brasileño, Jair Bolsonaro, aseguró que su país tiene como objetivo reducir las emisiones en un 37% para el 2025, una ambiciosa meta para el sexto país del mundo que más produce gases del efecto invernadero y entre críticas al presidente por políticas permisivas con la deforestación del Amazonas.
El presidente de Argentina, Alberto Fernández, aseguró que su país reducirá su contribución a los gases del efecto invernadero para el 2030 y está comprometido a desarrollar el 30% de la energía del país con renovables.
El mismo compromiso hizo el presidente colombiano Iván Duque, además de asegurar que para agosto del 2021, el sector energético en Colombia será compuesto en un 14% por renovables.
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, aprovechó para hablar de migración, pidiéndole a Biden dar fondos para un programa de siembra de árboles y beneficios migratorios para los nacionales de México y Centroamérica que participen en él.
«EE.UU. podría ofrecer a los que participen (…) después de trabajar por tres años que les den un permiso de trabajo temporal y después de tres año o más quizás obtener una residencia permanente», explicó el presidente mexicano.
El calentamiento global ha hecho que se intensifiquen los desastres naturales, que han afectado en particular a algunos países centroamericanos, azotados después del paso de dos huracanes (Eta e Iota en noviembre).
Los daños provocados por el huracán han sido achacados como uno de los factores que motivan la migración hacia EE.UU., en aumento en los últimos meses.
«El fenómeno migratorio no va a ser resuelto con medidas coercitivas, sino con justicia y bienestar», dijo López Obrador en su intervención en la cumbre.
El presidente Biden hizo énfasis en el coste de no actuar sobre el cambio climático: «Las señales son inconfundibles. La ciencia es innegable. Y el costo de la inacción sigue aumentando», dijo el presidente.
Coincide la cumbre con la 51 celebración del Día de la Tierra, en la que el Secretario General de la ONU, António Guterres, pidió tomar acciones ambiciosas para reducir la temperatura y aprovechar la pandemia como una oportunidad para que el mundo avance hacia la sostenibililidad.
El objetivo esbozado por el presidente Joe Biden solo se puede cumplir con una disminución pronunciada y rápida en el uso de petróleo, gas y carbón por parte de prácticamente de las economías de todos los países.