Redacción / IP Nicaragua
Limbo Bucardo, vicecoordinador de la organización Prilaka, denunció que los pobladores de los territorios indígenas siguen siendo objeto de violaciones a sus derechos humanos individuales y colectivos por resistirse a la invasión y a la colonización en sus comunidades.
Bucardo denunció otros factores externos que atentan contra la armonía, el desarrollo y la autonomía de los pueblos indígenas.
“Tenemos la imposición de las autoridades tradicionales, el deterioro del tejido social, la imposición de partidos políticos tradicionales que a lo largo de la historia no han podido cubrir las demandas de nuestro pueblo”, expresó el activista de Prilaka.
Invasión e impunidad de colonos
A consecuencia de las invasiones de los colonos que se registran desde el 2015 más de 50 líderes han fallecido por manifestarse contra estas violaciones, reveló Bucardo.
El vicecoordinador de Prilaka, afirmó que han sufrido otras vulneraciones como invasiones de tierras, asesinatos, violaciones sexuales, secuestros, despojo y desplazamiento forzado.
“Desde el año 2010 las comunidades indígenas vivimos en un apocalipsis, en una crisis más grave, más cruel. Hacemos énfasis a la oleada de la de invasiones de colonos, acompañados por sus crímenes que vienen cometiendo a la población, principalmente miskita y mayagna”, afirmó Bucardo.
Invasión de los territorios indígenas
De los 17 territorios en el Caribe Norte al menos 15 están invadidos en su totalidad, señaló el vicecoordinador de la organización Prilaka.
Bucardo explicó que la invasión consiste en el despojo de las áreas fértiles y boscosas donde viven los indígenas.
“Muy pocas veces se conoce sobre los crímenes ocurridos en contra de nuestra población. En el 2015 se registraron múltiples incidentes, asesinatos a líderes que han estado manifestándose en contra de las invasiones a comunitarios. Ninguno de los autores de los delitos han sido acusados”, reiteró Bucardo.
Los colonos, según Bucardo, cuentan con armamento de artillería pesada “que solo se usa para efecto de guerra, como UZI, AR-15, M60”.
En múltiples ocasiones han pedido al Ejército de Nicaragua y a las autoridades correspondiente que desarticulen dichas agrupaciones armadas, pero no hemos sido atendidos por la justicia como debe ser”, lamentó.
Gobierno debe cumplir demandas
Existen estructuras del Ejército de Nicaragua para velar por las demandas de los comunitarios como el Batallón Ecológico “Bosawás” que están orientados específicamente para el resguardo y preservación de las reservas ecológicas, recordó Bucardo.
“Se han visto muy pocas acciones por parte de esta institución. Es importante manifestar que el gobierno tiene obligaciones y compromisos con los territorios indígenas”, sostuvo Bucardo.
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El vicecoordinador de Prilaka mencionó que es deber del gobierno central del país respetar el Estatuto De Autonomía de las Regiones De La Costa Caribe de Nicaragua, como el cumplimiento de la Ley 445, que es la Ley del régimen de propiedad comunal de los pueblos indígenas y comunidades étnicas de las regiones autónomas de la Costa Atlántica de Nicaragua y de los ríos Bocay, Coco, Indio y Maíz.
También en la Constitución Política mandata que el gobierno creará mecanismo para garantizar esos mandatos que hasta el momento «no se ha cumplido».
Pocas acciones para protección
Bucardo afirmó que la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) otorgaron medidas cautelares y provisiones donde el gobierno se ve obligado a garantizarle seguridad a los territorios indígenas y comunidades, pero se han visto muy pocas acciones para el cumplimiento de esto.
“Demandamos a las instancias correspondiente que puedan atender a las demandas de nuestro pueblo. Últimamente se ha registrado, asedio y amenazas en dos territorios, mencionó Bucardo.
Además, el líder territorial señaló que los colonos amenazan con quemar toda una comunidad.
«Se ha denunciado y repito, demandamos a las instituciones, Ejército, Policía, gobierno regional, a las instancias de derechos humanos velar por el clamor de las comunidades indígenas de la Mosquitia de Nicaragua”, finalizó el activista.
