La periodista nicaragüense Letzira Sevilla Bolaños, urge realizarse una resonancia magnética, tras sufrir un accidente cerebrovascular, también llamado derrame cerebral.
En septiembre pasado, Sevilla, estuvo seis días internada en un hospital de Managua, en estado critico.
Antes de su hospitalización presentó fuertes dolores de cabeza, que según ella creía que era «la presión», dijo su mamá Sonia Bolaños, de 64 años, en una entrevista a un medio televisión nacional.
«Después fueron más fuertes, más intensos los dolores, colapsó y me la llevé al hospital», relató Bolaños, quien posteriormente tomó la decisión de llevarla donde un neurólogo, que no es más que un especialista que asiste en los problemas relacionados al sistema nervioso central.
El ataque cerebral dejó secuelas visibles en Sevilla, es decir, no puede hablar fluidamente y tiene pérdida de memoria. También perdió la movilidad que la parte derecha de su cuerpo, pero ha ido recuperando poco a poco a través de fisioterapias.
Sevilla ha ejercido la profesión desde hace más de 15 años, es originaria de Diriamba, un municipio de Carazo, y madre de dos menores.
Debido a la falta de oportunidades laborales y las secuelas del derrame cerebral, no podido trabajar. Su mayor preocupación es el sustento de su hogar y los gastos de las terapias y medicamentos. Además debe realizarse una resonancia magnética que tiene un costo de 500 dólares.
En junio de 2020 Sevilla sobrevivió a la pandemia de Covid-19, luego de varios días internadas en el hospital Vivian Pellas en Managua.
«Quiero darle gracias a Dios y a todas las personas que se solidarizaron conmigo. Yo creo que sin Dios esta batalla yo no lo hubiese podido librar», dijo la periodista cuando llegó a su casa en aquel momento.
Durante el pico de la pandemia del Covid-19 en Nicaragua, varios periodistas fallecieron producto de esta enfermedad, misma que fue negada y silenciada por el régimen en Nicaragua.
En redes sociales circula una fotografía con el título «Unidos por Letzira» donde urgen ayuda para comprar medicamentos y otros gastos. «Ayudemos a que esta gran mujer pueda volver con sus hijos», se lee.
Para ayudar a la periodista, quien fue editora en el periódico El Nuevo Diario en temas culturales, se habilitaron dos cuentas bancarias: Lafise Córdobas 129019844 y Lafise Dólares 117249296.
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