El opositor Félix Maradiaga, preso político del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo logró comunicarse con su esposa Berta Valle y su hija Alejandra, de 9 años, a través de una video llamada después de 18 meses de total incomunicación.
«Les comparto que después de año y medio Alejandra pudo tener video llamada con su papá», escribió Valle en su cuneta de Twitter.
La videollamada se realizó en el contexto de las visitas familiares que autorizó el régimen a los opositores detenidos en las celdas de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), mejor conocido como «El Chipote», en víspera de las festividades de Año Nuevo.
«Nuestro padre celestial tiene cuidado de nosotras. Agradezco a todos los que nos han ayudado y han estado atentos a la situación de las personas presas políticas en Nicaragua», detalló Valle.
Según Valle, por recomendación de una amiga, preparó a su hija para la posibilidad de la videollamada, debido a que ha pasado mucho tiempo sin saber de su padre.
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