Redacción / IP Nicaragua
El Alto Representante de la Política Exterior de la Unión Europea (UE), Josep Borrell, acusó al presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, y la vicepresidenta Rosario Murillo, de querer «ganar las elecciones sin competencia» y señaló que ambos «deben detener esta espiral autocrática y cambiar de rumbo» del país a tres meses de los comicios electorales programados para el próximo 7 de noviembre.
«El presidente Ortega y la vicepresidente Murillo deben detener esta espiral autocrática y cambiar de rumbo. La UE insta a las autoridades nicaragüenses a liberar a todos los presos políticos, a restablecer los partidos políticos, a derogar las leyes restrictivas y a permitir la celebración de elecciones libres y justas con el objetivo de la reconciliación y de una solución democrática», manifestó Borrell en su declaración.
Borrell criticó las últimas acciones del régimen de Ortega que a través del Consejo Supremo Electoral (CSE) eliminó de la competencia al partido Ciudadanos por la Libertad (CxL) a quien revocó su personería jurídica y suspendió la cédula nicaragüense y pasaporte de su representante legal Kitty Monterrey.
«Su decisión, implementada por el Consejo Supremo Electoral el 6 de agosto, de despojar de personalidad jurídica al último partido político de la oposición que quedaba antes de las elecciones generales de noviembre, destroza las perspectivas de un proceso electoral legítimo y creíble», insistió el Alto Representante de la UE.
No serán elecciones libres
La UE considera que en Nicaragua «la oposición ha sido eliminada» y que se está restringiendo a los nicaragüenses del ejercer el derecho al voto.
«La oposición ha sido eliminada. Se está privando a los nicaragüenses del derecho humano y civil básico de votar en unas elecciones creíbles, inclusivas y transparentes, de acuerdo con la Constitución de Nicaragua y las leyes y normas internacionales de derechos humanos», manifestó en su declaración la UE.
En el comunicado la UE enfatiza que la unidad cívica de todos los actores sociales, económicos y políticos nicaragüenses en favor de un cambio democrático pacífico sigue siendo «indispensable para construir un futuro mejor».
«La UE trabajará con la comunidad internacional para defender el diálogo y la democracia y promover el respeto del Estado de Derecho y de los derechos humanos en Nicaragua», puntualiza Borrell en su declaración.
La Unión Europea impuso sanciones individuales el 2 de agosto contra ocho funcionarios nicaragüenses acusados de cometer “graves violaciones de derechos humanos” y socavar la democracia, incluida Murillo.
Las sanciones incluyen congelar sus bienes, prohibir que ciudadanos y empresas de la UE provean fondos a los sancionados, y prohibir su ingreso a la UE. Desde 2020, la UE ha sancionado a un total de 14 funcionarios del régimen de Ortega.