* Policía realiza captura de activistas de la Alianza Cívica en Ocotal y Juigalpa.
Redacción / IP Nicaragua
Después de la campaña masiva en contra de Daniel Ortega con la frase “¡Se Va!” que realizó la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia en gran parte del territorio nacional, la Policía Nacional capturó al menos a cuatro opositores miembros de esta organización.
El exdiputado y asesor de la Alianza Cívica, Eliseo Núñez, confirmó que en el contexto de esa campaña que se realizó en 132 municipios del país, la fuerza pública detuvo a Juana Livex Castellanos Rodríguez, originaria del municipio de Ocotal, en el departamento de Nueva Segovia.
La opositora secuestrada, agregó Núñez, es miembro de la directiva territorial de la Alianza Cívica en esa zona del país.
En el municipio de Juigalpa, en el departamento de Chontales, detuvieron al ciudadano Alcides Díaz, un férreo opositor del Gobierno.
“Su único delito es no simpatizar con el régimen Ortega-Murillo”, manifestó Núñez.
Mientras que a tempranas horas de este miércoles la Policía llegó a la casa de la opositora Julia González, pero al no encontrarla en el inmueble, aprehendieron a su esposo, el doctor Erick Rafael Barberena y su hijo, José Barberena González.
A la opositora la acusan de pegar las papeletas en los diferentes espacios públicos en esa ciudad del país.
La campaña denominada “Operación Preso-198” organizada por la Alianza Cívica en coordinación con sus bases territoriales, consistió en pegar papeletas en la mayor parte de espacios públicos del país.
La imagen de Daniel Ortega, el preso 198, apareció en unas papeletas con la frase “¡Se Va!”.
“Esto es parte de la represión que estamos viviendo en la Alianza Cívica. Están tratando de destruir la red que se ha construido simplemente porque se han percatado que es una red capaz de poder poner cosas articuladas en el territorio nacional y esto la dictadura sabe que es parte de su salida”, señaló Núñez.
Desde hace dos años, cuando el estallido social, la Policía Nacional salió a las calles a reprimir las protestas pacíficas que inicialmente fueron encabezadas por jóvenes universitarios y a la que más tarde se unió gran parte de la población.
El exdiputado y asesor de la Alianza Cívica demandó la libertad inmediata de los opositores en Juigalpa y Ocotal, debido a que considera que no han cometido ningún delito.
“Exigimos la salida de nuestros miembros de la estructura, ellos no han cometido ningún delito, la protesta no es un delito, el divulgar expresiones no es un delito, la Policía se ha convertido en la policía personal de Ortega y lo único que defiende es a la familia, a su riqueza y todo lo que conlleva”, denunció Núñez.
En su más reciente boletín, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Oacnudh) reiteró que en Nicaragua persiste un clima de “ataques, amenazas, detenciones arbitrarias, hostigamientos e intimidación” contra cualquier opositor.
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