*La experta en temas de gobernabilidad y corrupción, Martha Molina, explica sobre las afectaciones que podrían tener las empresas y pulperías.
Redacción IP Nicaragua
La Ley de Rótulos presume ser otra medida recaudatoria del gobierno de Daniel Ortega, pero los propietarios de pulperías desconocen el impacto que podrían tener en sus negocios.
La Ley de Rótulos, Ley 1054, publicada en la edición de este 17 de diciembre del diario oficial La Gaceta, puede afectar a medianas y grandes empresas, incluso a los dueños de pulperías, advirtió la experta en temas de gobernabilidad, Martha Molina.
La experta en temas de seguridad afirmó que, los pulperos podrían pagar impuestos a la municipalidad de la publicidad que las empresas coloquen en sus viviendas, en caso de que éstas no lo hayan hecho.
“Lo primero que hay que mencionar es que esta Ley de Rótulos es una medida recaudatoria para financiar el presupuesto general de la República 2021, que desde ya se encuentra desfinanciado, o sea, más desfinanciado que los años anteriores”, resaltó Molina.
Los dueños de pequeños negocios como pulperías, tiendas de ropa, abarroterías y fruterías, sin embargo, desconocen el texto sobre la nueva Ley de Rótulos.
Aunque consideran “injusto” pagar por la publicidad de un producto que no les pertenece y que solo comercializan.
“Aquí vienen los proveedores de las empresas a las que uno les compra productos y te dicen que si les permitís colocar carteles, anuncios, o te pintan las paredes, supuestamente por la ubicación de la casa o porque sos uno de los negocios donde se venden más sus productos”, manifestó Gladys Marín, de 53 años, dueña de una pulpería con más de 20 años de existencia.
Según Marín, los propietarios de pulperías en muchas ocasiones por “atraer a los clientes”, consienten que las empresas coloquen anuncios en las paredes de sus viviendas.
“Además que, por el mantenimiento que le dan (las empresas) a sus anuncios y publicidad, te mantienen el local bonito, pero, ya no es responsabilidad mía si la empresa no pagó sus impuestos, suficientes con los que pagó yo, en eso ahí (las autoridades) están mal”, sostuvo Marín.
Por su parte, Juan Pablo Gómez, trabajador de una farmacia, expresó que desconoce sobre la nueva Ley de Rótulos, y que durante los más de seis años que tiene trabajando en este negocio, nunca han tenido alguna dificultad con las empresas que colocan anuncios publicitarios en la pared del negocio.
“Esta es una farmacia, pero aquí se vende de todo, normalmente los proveedores traen la publicidad y casi siempre se cambia el anuncio de la pared, si no me equivoco es cada año”, dijo Gómez.
Según el tipo de rótulo, manta o valla publicitaria, los propietarios de los rótulos deberán pagarle a la Alcaldía, “un canon anual de arrendamiento equivalente al 20 por ciento del impuesto anual del rótulo”, de acuerdo con el artículo 5 de la iniciativa de ley.
Los anuncios o carteles que, en cestos para depósitos de basura, en las bancas y casetas de parada de autobuses, en buses, taxis, o cualquier tipo de transporte de servicio público o privado, sea terrestre acuático o aéreo, también pagarán.
El impuesto en estos casos es de entres 20 y 50 dólares anuales por cada rótulo, pero de previo las empresas interesadas en pegar un anuncio debe contar con la autorización de la municipalidad y pagar el impuesto correspondiente, así como el canon de 20 por ciento sobre la tarifa.
La ley señala que, cada año deberá renovarse el permiso y pagar el impuesto correspondiente en dólares.
La ley que entró en vigencia con la publicación en La Gaceta, advierte que los anuncios publicitarios que no tengan los permisos municipales deberán ser removidos, y si no lo hacen, lo hará personal de las alcaldías.
“Lo que hay que hacer de ahora en adelante es pedirle a los proveedores que te dejen un recibo, un documento en el que ellos están al día con sus impuestos, para evitarle al pequeño comerciante problemas”, agregó Gómez.
La especialista en temas de gobernabilidad, considera que esta ley va afectar en mayor medida a las medianas y grandes empresas, quienes tendrán que pagar más por la publicidad que generen.
Molina señala que, en menor medida saldrán afectados los dueños de pulperías, ya que, los pagos de publicidad recae en ellos mismos.
“Eso significa que todos los proveedores que decidan colocar rótulos en las pulperías tienen que pagar ellos a la municipalidad, no el dueño de la pulpería”, aclaró Molina.
Los propietarios de las pulperías, deberán asegurarse que las empresas que requieran colocar anuncios publicitarios en las paredes de sus viviendas hayan pagado los impuestos.
“Ojo hay que hacer una salvedad, que el pulpero debe de estar claro y seguro, de pedirles a todos sus proveedores que les muestren que están al día en relación a la colocación de los rótulos, porque en un dado caso que no lo estén, quien va a tener que pagar es el pulpero”, recomendó Molina.
Para el economista, Luis Núñez, la recién aprobada Ley de Rótulos, es una buena iniciativa de los legisladores, porque es una “reivindicación” a algo que se ha venido dando desde 2013, cuando se hizo normativa de la Alcaldía de Managua.
“Han convertido a Managua en un enorme basurero de publicidad. Se bajaron muchos aranceles de lo que originalmente se proponía en la normativa de 2013. El problema es la aplicación de esto, la irracionalidad, andan de cacería”, manifestó Núñez.
Para el economista, tomando en cuenta que ya había una normativa, lo que había que hacer era “ajustarla, hablar con la gente y crear conciencia”.
“Todo esto tiene que ver con la conciencia de la población, no podemos aplicar la ley de manera irracional”, acusó Núñez.
Los dueños de pulperías, incluso medianos y pequeños propietarios de otros negocios, que no generan el presupuesto suficiente para pagar publicidad, normalmente elaboran sus propios carteles para promover sus productos.
“En todo caso la afectación del pulpero está en que no va a poner rótulos grandes donde den a conocer los productos que se ofrecen en la pulpería. Popularmente, vemos en las ventas que los dueños sacan cartulinas y ponen una lista de los productos que ofrecen, entonces, el pulpero que haga esto va a pagar impuesto por esa publicidad”, señaló Molina.
Por tanto, Molina recomendó algunas alternativas para evitar ser objeto de cobro de más impuestos.
“Lo que tienen que hacer es colocar sus carteles o anuncios al interior del negocio o bien utilizar otros mecanismos como redes sociales, grupos de WhatsApp donde den a conocer los productos que están vendiendo, esto con el objetivo de evitar pagar más impuesto de los que hasta ahora ya están pagando”, dijo.
Además, destacó, que la mayoría de estos negocios (pulperías) generalmente son familiares y que no generan demasiada cantidad de recursos financieros, “sino que les da el sustento diario de la familia”.
“Y si el pulpero recae en el pago de la publicidad generaría un gasto sumamente excesivo que no va a tener como pagarlo, y que va a conllevar al cierre del negocio y que la familia quede desprotegida, con esto se afectaría su derecho laboral, le derecho humano al trabajo porque el Gobierno lo que está haciendo es cobrarle más impuesto a las personas”, indicó Molina.
Los nuevos cobros de los anuncios de publicidad que se coloquen en las paredes de las pulperías son dolarizados, según establece la Ley 1054.
La Nueva Ley de Rótulos establece 40 tarifas impositivas para los permisos de los diferentes tipos de rótulos, vallas, mantas, y todo tipo de publicidad y propaganda que se coloquen, tanto en la vía pública como en áreas privadas.
Los cobros quedaron dolarizados y van desde los 10 hasta los 3,000 dólares de forma anual, según el tipo de rótulo.
¿Qué dice la Ley Monetaria de Nicaragua, respecto a este tema de la dolarización que está presente en está Ley de Rótulos?
“Nicaragua establece que la unidad monetaria del país es el córdoba, los precios, impuestos, tasas, tarifas, sueldos, contratos y obligaciones se liquidarán exclusivamente en córdobas”, argumentó Molina.
“Todos los ciudadanos nicaragüenses ganamos en córdobas, no en dólares, es como ilógico y también ilegal que vayamos a pagar un impuesto que se nos esté cobrando de manera dolarizada, porque nuestra moneda oficial es en córdoba, no en dólares”, explicó.
La Ley de Rótulos fue aprobada por 76 diputados, el 10 de diciembre.
Los únicos exentos de los impuestos anuales son los rótulos publicitarios y de propaganda de las instituciones del Estado, de la Cruz Roja, de los bomberos y de las congregaciones religiosas.
Foto portada: El Nuevo Diario.
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