Persisten violaciones de derechos humanos de presos políticos: familiares hacen múltiples denuncias

Redacción / IP Nicaragua 

El deterioro físico de la abogada María Oviedo continúa debido a la pérdida de peso, la mala alimentación y la falta de acceso a la luz solar, denunció la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH).

«Refieren los familiares que la doctora Oviedo se encuentra irreconocible, ha perdido peso, su piel se encuentra con machas, debido a que solo recibe diez minutos de sol», denunció el abogado Eber Acevedo, miembro de la CPDH.

Oviedo fue detenida el 29 de julio mientras se encontraba en la casa de su madre en el departamento de León, al occidente de Nicaragua, y fue acusada oficialmente el 9 de septiembre por el presunto delito de “conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional”.

La abogada María Oviedo.

Róger Reyes en estado delicado

La condición del abogado Róger Reyes, quien es miembro de la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB) también es delicada denunció su esposa Fernanda Guevara.

«Está perdiendo la memoria y está sumido en una profunda depresión», dijo Guevara.

Agregó que Reyes se encuentra por segunda ocasión en una celda de castigo de dos metros por dos metros de extensión.

Reyes, de 36 años, cumplió este martes 137 días detenido en la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), Complejo Evaristo Vásquez Sánchez, conocido como el nuevo Chipote, donde el régimen mantiene a más de 40 opositores presos.

El abogado Róger Reyes está presentando problemas de la memoria.

“Esta situación ha generado secuelas en su salud física y emocional, producto del trauma de estar detenido, incomunicado, aislado e interrogado”, reiteró Guevara, a tal punto que Reyes no recuerda ni a sus hijas.

“Le tuve que decir que teníamos dos hijas, solo recuerda a una y tuve que describirle a nuestra segunda hija. La situación que hoy relato la comprobé durante la visita del 2 de enero, entre las 9:45 y 11:40 de la mañana», insistió Guevara.

Le han negado la atención de un especialista

De acuerdo con el relato de Guevara, el opositor también está presentando problemas en la vista, insomnio y en las últimas semanas ha presentado estreñimiento.

Sobre la pérdida de memoria dijo que él mismo ha solicitado en más de cinco ocasiones al médico de base de la DAJ ser evaluado por un sicólogo, pero que no le dan respuesta.

«Esta situación es de urgencia, ya que causa daños irreparables en la integridad física y psicológica, el aislamiento es una de las peores formas de torturas y no se puede minimizar. Con mucho dolor, miedo y angustia hoy hago uso de mi derecho a la denuncia pública, no solo para seguir exigiendo al Estado y en particular a la Policía su inmediata liberación, sino también el cese inmediato de las torturas, que se le permita ser examinado y tratado de emergencia por un especialista de salud mental», demandó Guevara.

Estado de los otros reos políticos

Los familiares de los demás presos políticos, encarcelados DAJ, denunciaron también las graves condiciones de salud en las que se encuentran sus parientes, las que pudieron constatar durante las últimas visitas hechas entre el 31 de diciembre de 2021 y el 2 de enero de 2022.

Alertaron a través de un comunicado que los presos políticos de la tercera edad están en situación crítica.

El opositor José Pallais.

En el caso de José Pallais denunciaron que ha perdido casi 90 libras y que su estado de debilitamiento lo ha llevado a sufrir dos desmayos.

El exdiplomático Mauricio Díaz ha perdido 30 libras se ha desmayado dos veces, tiene manchas en su piel y lagunas mentales.

La opositora Violeta Granera ha perdido dientes, se le dificulta comer y tiene manchas rojas en la cara por falta de sol.

Celdas de castigo

Sobre el exembajador Edgar Parrales, quien carece de intestino grueso, tiene una hernia y ha perdido 12 libras en 40 días.

El gerente general de La Prensa, Juan Lorenzo Hollman, tiene una mancha en el ojo y también ha sufrido de desmayos.

Irving Larios, Miguel Mendoza, Roger Reyes, Álvaro Vargas, Michael Healy y Yader Parajón permanecen, desde su secuestro, en celdas de castigo, «lo que nos causa gran alarma y preocupación», denunciaron.

Tamara Dávila, Ana Margarita Vijil, Suyén Barahona y Dora María Téllez siguen siendo sometidas a aislamiento permanente, confinadas en celdas solitarias.

Es por ello, que los familiares demandan al régimen su inmediata liberación, y exigen que mientras estén ilegalmente detenidos se permita el ingreso de una delegación del Comité Internacional de Cruz Roja (CICR) para que verifique las condiciones de salud física y mental de cada persona presa política.

 

 

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