Ante el repentino aumento de la migrantes irregulares provenientes de distintos países, que buscan cruzar Honduras en ruta a EEUU, organismos humanitarios están implementando planes de atención en la zona fronteriza entre Honduras y Nicaragua.
En su último informe, el Instituto Nacional de Migración de Honduras dijo que solo entre el 1 enero y el 24 de abril de 2022, ingresaron de forma irregular unas 24.230 personas provenientes de Cuba, Venezuela, Colombia y Haití.
Ante el alto tránsito migratorio, instituciones humanitarias como la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y la Cruz Roja han exhortado al gobierno de Honduras a declarar “una emergencia migratoria” y están implementando planes de atención.
La OIM dio a conocer que se ha movilizado a la frontera que divide a Honduras con Nicaragua para monitorear la situación y entregar insumos básicos como agua y productos alimenticios para fortalecer la capacidad de respuesta de los albergues de la zona.
Jorge Peraza, jefe de Misión de la OIM de la zona, dijo que “la presencia de autoridades y contrapartes en esta zona es vital” sobre todo para garantizar se respeten los derechos de los migrantes que utilizan los diferentes albergues habilitados.
Por su parte Kenia Zerón, defensora de los derechos los migrantes y atiende a aquellos que llegan a diario a los albergues, dijo a la Voz de América que están vigilantes para evitar “violaciones a sus derechos” ya que en muchos de los casos los habitantes de la zona tratan con desprecio a los migrantes.
Nota de VOA.