La Cancillería de Nicaragua acusó a Costa Rica, de “continua injerencia en los asuntos internos de otros países” y de violar los derechos humanos de los migrantes nicaragüenses, luego de que el vecino país se pronunciara en desacuerdo por el allanamiento al periódico La Prensa en Nicaragua por parte de autoridades nicaragüenses.
La denuncia enviada al canciller costarricense, en forma de “nota diplomática”, durante el fin de semana, además profería una serie de insultos contra el Gobierno de Carlos Alvarado Quesada y su gabinete. En ella Nicaragua afirmaba ser un país “soberano y no ser colonia de nadie”.
Además, acusaba a la Administración Quesada de “racismo y extremismo” y de acosar “a migrantes y trabajadores nicaragüenses”. Asimismo, aseguraba que éstos eran usados para sus “estrategias sociales y políticas”.
Ante las acusaciones, por su parte el canciller costarricense Rodolfo Solano Quirós, dijo a la Voz de América que el Gobierno de Costa Rica “no tiene mayores comentarios que realizar” con respecto a la misiva.
Según Solano Quirós, Costa Rica “reitera su profunda preocupación, llamando al respeto de la institucionalidad democrática, los derechos humanos y la libertad de expresión en Nicaragua”.
La cancillería de Costa Rica reaccionó mediante un comunicado al allanamiento realizado por las autoridades nicaragüenses al diario La Prensa, el periódico más antiguo del país.
La nota citaba que “la libertad de prensa debe ser respetada y defendida». “Constituye un pilar fundamental de las instituciones democráticas. Por lo tanto, condenamos los actos contra el diario ‘La Prensa’ y reiteramos nuestro llamado al respeto de los derechos humanos y la libertad de expresión en Nicaragua”, agrega.
De acuerdo con lo reiterado a la VOA por el canciller costarricense de Costa Rica, “la libertad de prensa debe ser respetada y defendida, pues constituye un pilar fundamental de la institucionalidad democrática”.