El intercambio de detenidos entre Estados Unidos y Venezuela mantiene “vivo” el acuerdo político electoral firmado en octubre pasado por delegados del gobierno de Nicolás Maduro y su oposición en Barbados, de acuerdo con los expertos.
Las administraciones del presidente estadounidense Joe Biden y de Maduro honraron el miércoles su acuerdo de intercambio de detenidos, que habían mantenido en reserva hasta que se concretaron las excarcelaciones.
Washington dejó en libertad y entregó a las autoridades venezolanas a Alex Saab, un empresario colombiano que Caracas defendió como su diplomático y quien había llegado extraditado a Florida desde Cabo Verde en noviembre de 2021.
Caracas, por su parte, liberó a 10 estadounidenses, 6 de los cuales el Departamento de Estado de Estados Unidos calificó como “detenidos injustamente”. Adicionalmente, se conoció la liberación de al menos 20 venezolanos detenidos por razones políticas. Según algunos reportes, serían 24.
Benjamin Gedan, director del Programa para Latinoamérica en el Wilson Center, un centro de estudios en Washington, comentó a la Voz de América que el intercambio de detenidos tiene vinculación con los acuerdos de octubre.
“El canje mantuvo vivo el acuerdo de Barbados, porque el régimen también liberó a 20 presos políticos”, entre ellos el presidente de la ONG Súmate, Roberto Abdul, y a seis sindicalistas condenados a 16 de años de prisión por presunta conspiración contra el gobierno venezolano, manifestó.
¿Elecciones potables o no en Venezuela?
Un comunicado del secretario de Estado Antony Blinken saludó la liberación de estadounidenses, presos políticos venezolanos y un método para la rehabilitación de todos los candidatos en Venezuela, anunciado el 30 de noviembre.
Según Biden, esas acciones “representan pasos importantes y concretos” para la hoja de ruta electoral acordada por el oficialismo y la oposición en Venezuela.
De acuerdo con Gedan, la valoración definitiva sobre si convino o no liberar a Saab dependerá de las condiciones democráticas de las elecciones presidenciales previstas para el segundo semestre de 2024, según lo pactado en Barbados.
“Si al final del día no hay elecciones más o menos libres y justas en el año entrante, será difícil justificar la liberación de Saab, cuya presunta criminalidad socavó la aplicación de las sanciones internacionales en contra de la dictadura venezolana”, advirtió.
Se reduce la presión de la negociación
Giulio Cellini, abogado, analista especializado en procesos de transición y director de la firma LOG Consultancy, subrayó “la presión” que Estados Unidos aplicó hace semanas a Venezuela para la liberación de personas injustamente detenidas.
El consultor sobre relaciones internacionales destacó que a Saab “se le exprimió” la información que tenía sobre las actividades del Estado venezolano.
Juan González, asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, dijo el miércoles que el empresario “cooperó” con el Departamento de Justicia de Estados Unidos. “Compartió información”, afirmó en entrevista con la periodista Carla Angola.
“Sin su liberación, muchas cosas de la negociación se iban a mantener trancadas. La liberación de Saab libera un poco la olla de presión que había dentro del proceso de negociación”, aseguró Cellini.
El oficialismo había designado a Saab como miembro de su delegación para las negociaciones, antes de también nombrar como tal a su esposa, Camilla Fabri.
Cellini dijo creer que el canje “debería destrabar un poco el juego del proceso de negociación”, si bien ello no significa que deban esperarse acuerdos inmediatos sobre las condiciones electorales de las presidenciales de 2024, advirtió.
*Con información de la Voz de América