Los obispos Silvio Báez y Rolando Álvarez. IPNicaragua
La Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH), en Miami, Estados Unidos, propuso este martes a los obispos nicaragüenses Rolando Álvarez y Silvio Báez como candidatos al Premio Nobel de la Paz por su labor en defensa de los derechos humanos y valentía de enfrentar al régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Según la organización, monseñor Álvarez, preso político del régimen y monseñor, exiliado y desterrado por la dictadura,»son el testimonio vivo de lo que el pueblo entero de Nicaragua ha sufrido bajo un régimen cuyas manos están manchadas de sangre y cuyo récord de derechos humanos deja mucho que desear».
La CPDH informó que envió una carta al Comité del Premio Nobel para la Paz, para «someter a consideración nuestro apoyo a la candidatura de monseñor Rolando José Álvarez Lagos y monseñor Silvio José Báez Ortega para el Premio Nobel de la Paz».
Marcos Carmona, secretario ejecutivo de la CPDH destacó la labor de los obispos por la defensa de los derechos humanos en el país y expresó que otorgar este Premio a los religisos «sería de gran trascendencia para el pueblo de Nicaragua».
La Organización expuso en la carta, que monseñor Rolando Álvarez, ha estado en prisión por más de 11 meses acusado por delitos fabricados y sentenciado por jueces nombrados por el régimen mismo. Sin embargo, su entereza no ha mermado su vocación para levantar su voz con la que predica como siervo de los evangelios y como luchador pacífico de la causa de la justicia y la libertad.
Mientras que monseñor Silvio Báez, en “sus homilías cada domingo desde que estaba en Nicaragua han sido en defensa del verdadero espíritu de las enseñanzas de Dios y la defensa de los derechos humanos universales”, más aún después de su exilio forzado en abril de 2019.
Desde 1901, el Comité Nobel Noruego otorga el Premio Nobel de la Paz a personas o/y organizaciones que han luchado por la paz, ya sea defendiendo los derechos humanos, promoviendo el desarme o resolviendo conflictos.
De acuerdo al sitio web del Comite del Nobel, “una nominación para el Premio Nobel de la Paz puede ser presentada por cualquier persona que cumpla con los criterios de nominación”.
El pasado 10 de julio, los miembros de la Sociedad Internacional de Derechos Humanos (ISHR, por sus siglas en inglés), propusieron como candidatos para recibir el Premio Nobel de la Paz a ambos obispos.
En julio, monseñor Álvarez, también fue propuesto por el grupo político Renew Europe y varios eurodiputados independientes al premio Sájarov a la Libertad de Conciencia que otorga cada año el Parlamento Europeo a personas e instituciones que se destacan en la defensa de los derechos humanos.
La nominación del obispo de Matagalpa también cuenta con el apoyo de la Fundación para la Libertad de Nicaragua, World Liberty Congress, que incluye a organizaciones de derechos humanos de Cuba, Venezuela y Nicaragua.
Monseñor Álvarez está confinado desde el 9 de febrero de este año las celdas del Infiernillo, una cárcel de máxima seguridad del Sistema Penitenciario de Tipitapa, y enfrenta una condena de 26 años y cuatro meses de cárcel, por negrase a ser desterrado del país junto a 222 presos políticos
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