Los dos equipos de la capital jugarán esta noche el primer duelo de la tercera final entre ambos en la nueva atapa de los Pomares. Las dos veces anteriores los Dantos se quedaron con el título.
Harold Briceño Tórrez
Como si los números pares les fueran de buena suerte a los Dantos y los Indios del Bóer, estos equipos iniciarán esta noche una tórrida batalla por el título del Pomares 2020, tras haberse enfrentado en las Finales del 2016 y del 2018, ambas ganadas por los Dantos. ¿Podrán esta vez los Indios del Bóer quebrar el dominio de sus rivales de ciudad y volver al trono del beisbol nacional?
En el 2016, en una final que todavía se jugó en el viejo estadio nacional Dennis Martínez, los Dantos se impusieron en la Final al Bóer en seis juegos. Dos años después volvieron a encontrarse y la historia fue nuevamente favorable para la “Maquinaria Roja”, que en esta ocasión se coronó en cinco partidos. De tal forma que los antecedentes están a favor de los Dantos y condenan al Bóer.
Pero no siempre en el beisbol, un deporte tan impredecible como dramático, los antecedentes o las estadísticas marcan el rumbo de una serie, menos cuando es por el título. Esa es la esperanza de los Indios, que llegan a este enfrentamiento con un picheo que en el camino se fue reforzando según sus necesidades y un bateo que luce tan explosivo como siempre.
Para esta noche en el Estadio Nacional Dennis Martínez, el primer duelo de pistoleros será entre el novel tirador jinotegano Luis Castellón, y el experimentado miembro de selección nacional Jorge Bucardo.
Castellón es un pícher de perfil zurdo que lanzando para las Brumas en la primera etapa, ganó tres y perdió seis juegos, y dejó su efectividad en 6.07. Son cifras no muy alentadoras, sin embargo, en los playoffs, ya como refuerzo del Bóer, ganó dos juegos y no perdió ninguno, y dejó su promedio de carreras limpias permitidas en 1.98. Una mejoría notable que será puesta a prueba hoy por la feroz ofensiva de los Dantos.
Por su parte, Jorge Bucardo es el “as” del picheo de los Dantos y de la selección nacional. Su experiencia y correcto manejo de sus picheo lo hacen un rival peligroso para el Bóer. En la etapa regular, Bucardo ganó seis partidos, perdió dos y salvó tres, todo con una efectividad de 2.24. En la postemporada ganó dos veces, perdió una y en otra ocasión se apuntó un salvamento, aunque su efectividad se elevó alarmantemente hasta 5.87.
Así que el duelo de esta noche será entra la impetuosa juventud de Luis Castellón y la experiencia de Jorge Bucardo.
Tras liderar el grupo B con un balance de 22 victorias y ocho derrotas en la primera vuelta y extender su dominio hasta la segunda etapa de la temporada regular, los Dantos avanzaron a la postemporada, donde barrieron en tres juegos a Nueva Segovia en los cuartos de final, pero sufrieron durante siete juegos para superar a Estelí en semifinal.
Por su parte, el Bóer lideró su grupo (A) con récord de 19-11 en la primera ronda y siguió así hasta el cierre de la etapa regular. Luego batalló fuerte para superar en cinco juegos a Matagalpa en los cuartos de final, aunque después no atravesó mayores dificultades en la serie semifinal contra los Tigres de Chinandega, equipo al que barrieron en cuatro juegos.
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