Al menos 43 detenciones arbitrarias se registraron hasta finales de 2023 en Nicaragua, lo que elevó el número de personas presas políticas a 119, según registros del Mecanismo para el Reconocimiento de Personas Presas Políticas.
Según el informe, el régimen detuvo a las 43 personas entre el 1 de noviembre y el 31 de diciembre del 2023 por «posibles motivaciones de persecución política», de las cuales 13 fueron liberadas y se estima que 30 aún están en la cárcel.
El Mecanismo advirtió que los presos políticos que están en el Sistema Penitenciario Jorge Navarro, conocido como «La Modelo», son «fuertemente golpeados y siete fueron aislados luego de intentar iniciar una huelga de hambre».
Los presos aislados, según el Mecanismo, cantaron canciones alusivas a Nicaragua, situación por la cual también los aislaron. Ellos, según la denuncia, solo intentaron «exigir mejores condiciones carcelarias y el cese a los actos de tortura».
Al menos 19 mujeres están en la lista que elabora el Mecanismo, organización que construye los datos con ayuda de organismos de derechos humanos, familiares de los presos, excarcelados y abogados.
14 sacerdotes presos políticos
Como resultado de la persecución política contra la Iglesia católica en Nicaragua, el Mecanismo identificó a 14 sacerdotes detenidos hasta finales de 2023.
«Se incrementan la represión contra la libertad de culto (…) Aumentando el hostigamiento y amenazas al resto del clero religioso», según el informe.
Después de liberar en octubre 2023 a 12 sacerdotes detenidos de manera arbitraria y desterrarlos a Roma, en un lapso de dos meses, el régimen encarceló al menos a 14 sacerdotes, obligando a otros a huir del país o buscar refugio seguro.
«El pasado 20 de diciembre, se intensificó la represión contra los sacerdotes y feligresía, aumentando las denuncias por amenazas, hostigamientos y detenciones exprés. Posteriormente se liberó a dos sacerdotes, aunque se mantienen bajo vigilancia de parte de la policía nacional», según el Mecanismo.
